Estaba recién separándose, comprometido con su salud y por supuesto con su cuerpo, parecía un globo aerostático a punto de volar (ya que no es un hombre muy alto).Se sometió a una cirugía, donde le redujeron el estómago, adelgazó 27 kilos fue pasando la angustia y la ansiedad de su separación.Comenzó a preocuparse por él, y ocuparse.Con 27 kilos menos tuvo que comprarse prendas nuevas, ya que todas le quedaban muy grandes, otras rescatar y comenzar de cero para “volver a las pistas” (estar actualizado, para presentarse como hombre separado).Aparte del guardarropas, trabajé con él sobre su cabello, su barba, y a medida que iba viéndose diferente, volvió a surgir en él su estilo de galán y hombre bien arreglado, que tantos años de matrimonio, trabajo y gordura lo habían tapado.Los hombres son para mí un gran desafío ya que cualquiera piensa que no hay mucho por hacer con ellos, pero en verdad, si bien eso parece, la realidad es que con ellos hay mucho trabajo y trabajo súper interesante. Por otro lado, según mi experiencia, algunos son más consumistas que las mujeres, no son muy sentimentales con las cosas que tienen que dejar ir y aceptan mejor los cambios.En el caso de Carlos, fui ajustando su imagen con la indumentaria, con su look que lo rejuveneció mucho, y también de a poco con su actitud de compra, de cómo vestirse. Este último punto es súper importante, ya que las personas que tienen mucho sobrepeso y durante tanto tiempo, están acostumbrados a vestirse “de pijamas” (una expresión mía, cuando se visten con prendas flojas y sin formas), que son prendas muy cómodas.Carlos entendió que ante una compra tendría que mandar a retocar los ruedos, por su tamaño, las prendas que si puede usar y las que no.Cómo debería llevar su cabello y barba a fin de verse actualizado, más delgado y más joven. Que los perfumes marcan la diferencia de una imagen, así como también incorporó los accesorios, tales como sombreros, sandalias, anteojos y una serie de indumentarias más que antes no existían en su espectro.Los colores que le favorecen y sobre todo un ejercicio que lo hace en el servicio de mantenimiento, abandonar el look pijamas. Para cada ocasión, vestir adecuadamente es la opción.Cuando realizan el asesoramiento es difícil que los cambios no sucedan, en el caso de Carlos, aparte de dar un vuelco a su imagen, presta atención a sus hobbies, como la fotografía y deportes no tradicionales. Siempre hay tiempo para cambiar, modificar, y aprender a vivir diferente, ya sea porque la vida nos impulsa a eso o porque nosotros nos impulsamos a un cambio. Colabora Analía PolasekAsesora de ImagenDiseñadora de IndumentariaEn [email protected] +549 376 4901948





Discussion about this post