Es una incertidumbre que tiene todo el pueblo, porque el servicio de agua potable en El Soberbio está interrumpido hace una semana porque la bomba impulsora que envía agua desde el Río Uruguay no puede cumplir su función porque el agua la cubre y es imposible llegar hasta ella para arreglarla. Esta situación, que sufre todo el pueblo, afecta también a la Epet 39 que debió cerrar sus puertas. “No hay una solución a la vista y ya completamos tres días sin clases. Estamos preocupados porque con los paros docentes los chicos estuvieron mucho tiempo sin actividades. Con ese panorama no podemos suspender así las actividades pero tampoco podemos continuar”, señaló Sergio Vallejos, director de la institución, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN.LA INFORMACIÓN COMPLETA EN LA EDICIÓN PAPEL DEL SÁBADO 17




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