POSADAS. La Justicia le dictó la prisión preventiva a uno de los dos detenidos bajo sospecha de ser integrantes de la banda de estafadores conocida como de las “Nueve Reinas”, señalaron fuentes oficiales. Se trata de un individuo de la comunidad gitana, quien fue imputado en las últimas horas por “estafa en varios hechos y en concurso real”. Este hombre fue arrestado junto a su presunto cómplice a mediados de mayo pasado, durante un operativo que tuvo inesperadas derivaciones, ya que un funcionario policial terminó arrestado al ser sindicado como posible cómplice. Es que, de acuerdo a la investigación, el uniformado advirtió a través de mensajes de texto a parte de la gavilla que las patrullas estaban a punto de llegar a sus domicilios. Vale recordar que esta organización delictiva, que al parecer integran los sospechosos, estafó a personas de la tercera edad con el “cuento del nieto” o “del sobrino”, copiando una de las tantas estafas que perpetraban los dos protagonistas de la conocida película argentina protagonizada por Ricardo Darín, que da nombre a la banda. Se estima que con esta maniobra fraudulenta se alzaron con más de 100 mil pesos en 45 días. La reiteración del modus operandi hizo que la Policía pudiera ir atando cabos hasta llegar a los presuntos “cerebros” de la organización, que se hacían pasar por parientes para robarles dinero con distintas artimañas. Es así que lograban que las víctimas entreguen a terceras personas dinero u objetos de valor. Antes de este cobarde accionar, obtenían datos certeros y hacían una llamada telefónica fingiendo la voz del nieto u otro familiar directo. Con determinadas excusas, les pedían plata u otros objeto de valor. Los damnificados vivían solos. El presunto poliladron El día en que los efectivos, en compañía del juez instructor, Marcelo Cardozo (del Juzgado de Instrucción 1 de Posadas), se dirigían a allanar las viviendas de dos integrantes de la comunidad gitana, llamativamente se cruzaron con los sospechosos que huían a toda velocidad en una camioneta. Ambos individuos fueron detenidos y, al analizar sus teléfonos celulares, los pesquisas se encontraron con mensajes de texto que les advertían de los procedimientos policiales. Luego se supo que fueron enviados desde un número perteneciente a un integrante de la División de Investigaciones Complejas. El uniformado fue arrestado, se abstuvo de declarar ante el magistrado en su momento y luego fue liberado bajo fianza, aunque quedó supeditado a la causa. Por otra parte, las fuentes consultadas por este diario indicaron que la situación del otro involucrado detenido -también integrante de la comunidad gitana- podría definirse en los próximos días.





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