POSADAS. “Con muy poco, se puede cambiar mucho. El 5% de tú tiempo puede cambiar el 100% de la vida de alguien que lo necesita”. Con esta idea un grupo de personas quienes desarrollan una tarea social en Villa Cabello de esta ciudad, buscó respaldo legal a partir de una fundación orientada al voluntariado para trabajar en la estructura primaria desde el aprendizaje.“El fin último es la inclusión. Básicamente todo el espíritu de quienes estamos participando en este proyecto es generar un espacio para la igualdad de oportunidades”, dijo a PRIMERA EDICIÓN, Roque Cantero el presidente de la Fundación para el Crecimiento, Desarrollo y la Inclusión Social (CDIS).Dentro de este colectivo, cada uno desde su especialidad profesional, aportó recursos para abrir una pequeña oficina, donde también hay un aula de estudios, situada en Eva Perón 2829. La institución, absolutamente desligada de la política partidaria, con lo cual los recursos provienen de algunas donaciones y mayormente del bolsillo de sus miembros. En ese sentido, el presidente de la fundación explicó que las personas que se sientan motivadas a dar una mano pueden acercarse a las oficinas de la ONG de lunes a viernes a partir de las 18.Si bien ya existe una experiencia previa en el voluntariado, hace seis meses con la personería jurídica lograron la independencia deseada para trabajar con comodidad y respaldo. En la actualidad, según Cantero, en el área de educación cuentan con el apoyo que brindan dos docentes con experiencia, al tiempo que se avanza en la incorporación de una tercera profesional de esa disciplina, por la importante demanda. En conjunto se está diseñando un pequeño taller de lecto-escritura dirigido a niños de primero, segundo y tercer grado que muestran dificultades. Si bien es cierto que en una primera línea de acción se trabajó sobre la necesidad de reforzar la enseñanza de los contenidos en las aulas, también se está armando un grupo de trabajo para los barrios, por un lado con donaciones para las familias; y por otro hacer con ellas un taller de costura. “La idea es que las personas que reciben donaciones, vean la ayuda con una valoración distinta, que haya un aprendizaje en el trasfondo sino no hay transformación”, dijo.
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