POSADAS. La asociación civil “Voluntades” organiza para este sábado y domingo la feria anual de ropas, calzados y libros. Esta actividad, junto al festival de danzas, constituyen las dos principales fuentes de ingreso de esta organización cuyo objetivo es ayudar a los pacientes internados y a sus familias. La feria tendrá lugar en la Capilla Stella Maris, aledaña a la avenida costanera, el sábado de 9 a 20 y el domingo de 9 a 12. “Desde el año pasado venimos preparando todo para esta feria, a medida que recibimos donaciones las clasificamos, lavamos y embolsamos”, contó a PRIMERA EDICIÓN la fundadora de la organización, Maia Ayrault. Parte de esos elementos van dirigidos a los pacientes internados en los hospitales Madariaga, Baliña y Fátima; y lo restante estará a la venta este fin de semana. “No queremos quedarnos con nada, ojalá la gente nos acompañe con esta propuesta. Año a año fuimos aumentando la cantidad de cosas a la venta, todas tienen un precio muy bajo… es una gran oportunidad para las familias. Este año contamos además con muchos libros de todo tipo, desde escolares a literatura de ficción, algunos muy actuales y otros de colección”, detalló Ayrault. Personas de acción Detrás de Voluntades no hay más de veinte voluntarios, pero su labor llega a cientos y cientos de mujeres, hombres y niños en los momentos de mayor vulnerabilidad: en la enfermedad. “No todos los voluntarios están preparados para hacer las visitas a los hospitales, sólo somos cinco las personas que vamos a los nosocomios y hablamos cama por cama con cada uno de los internados. Si bien nosotros nacimos con el objetivo de asistir ante las necesidades materiales de los pacientes más pobres, nuestro propósito como organización se amplió casi de inmediato porque nos encontramos que las personas necesitan que las escuchen, que les brinden compañía, cariño y contención. Para nosotros es muy importante el contacto personal y directo con los pacientes, a ellos les preguntamos qué les hace falta y cómo se sienten… pese a que mucha gente cree que nos piden más de lo que necesitan para aprovechar la oportunidad, eso no sucede en la realidad. A veces terminamos el recorrido en el hospital y nuestro carrito con las cosas que llevamos (toallas, jabones, abrigos, ropa interior, camisones, pañales de adultos…) sigue lleno”, relató Maia, un referente misionera de solidaridad. Cada uno hace lo mejor que puede y, en Voluntades, este es el criterio con el que se organizan las actividades de cada uno de los voluntarios: algunos cosen, otros se dedican a la clasificación de las donaciones, otros a lavar la ropa y otros, como Pochola, de 86 años, a crear con sus manos objetos para regalar al corazón. “Pochola usa restos de telas y sábanas rotas para confeccionar carteras y cartucheritas que luego sorteamos entre las pacientes… son muy valorados los bolsitos que Pochola hace con los vaqueros viejos, no sólo porque son hermosos sino también porque muchas llevan sus cosas de valor en bolsitas de supermercado. Con las sábanas rotas, Pochola hace además unos camisones preciosos”, contó Maia. Cómo ayudar todo el año Voluntades recibe donaciones todo el año. Para ello, cuenta desde hace dos años con una sede permanente ubicada en Santa Fe 1446, segundo piso “G” donde atienden los miércoles y viernes de 16 a 18. Allí instalaron el lavarropas que adquirieron con la recaudación del último Festival de Danzas de Teresita Sesmero (cada año lo recaudado por la presentación de esta academia que realizan en el auditórium Montoya es destinado a Voluntades).Las personas que quieran sumar su granito de arena para ayudar a otros a través de “Voluntades” pueden donar pañales, elementos de higiene personal, ropas, zapatos, libros, sábanas rotas, toallas, puntillas, botones, cierres y ropa interior.





Discussion about this post