POSADAS. Un vendedor ambulante aseguró que vio cuando Rosaura Aquino (32) abordaba un colectivo de larga distancia. Se lo dijo a una representante de una de las comisiones vecinales de Itaembé Miní que colaboran con la búsqueda de esta madre de seis hijos desaparecida desde hace doce días. Julia Zacobich aseguró a este diario que el hombre se comunicó con ella en forma telefónica -luego de ver el afiche que los vecinos pegaron en distintos puntos de la ciudad- y le manifestó que estaba prácticamente seguro de que era la misma mujer que el pasado martes vio subir a un micro en la terminal de ómnibus de Posadas. El dato es una luz de esperanza para los padres de la joven madre, quienes quedaron al cuidado de sus seis hijos menores desde que Rosaura salió de su humilde hogar el sábado 10 de enero último, a primera hora de la mañana. Tenía la intención de pagar unas cuentas en el centro y después tenía previsto viajar hasta Santa Ana para visitar a su expareja, quien se encuentra privada de su libertad en Loreto, purgando una condena desde hace más de cinco años. Desde entonces su familia no sabe nada de ella. Lo primero que hicieron sus padres fue comunicarse con su exconcubino, quien les dijo que Rosaura no lo fue a visitar ese día. Esa información sería contradictoria, pues efectivos de la comisaría Novena -que investigan el caso por jurisdicción- establecieron que la mujer sí estuvo en la penitenciaría. Se desconocen aún los motivos que pudieron llevar al hombre que se encuentra detenido a darles una versión distinta a los desesperados padres de Rosaura. Lo cierto es que ahora existe una nueva pista. Cabe recordar que la mujer se gana la vida como empleada doméstica. Sus seis hijos la esperan en su casa ubicada en el barrio 50 Viviendas Costanera de Itaembé Miní. Mientras tanto, están al cuidado de sus abuelos maternos.
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