POSADAS. La jueza Estela Ferreiros, integrante de la Sala Séptima de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo y presidenta de la Sociedad Argentina de Derecho Laboral, quien dictó recientemente un seminario en esta ciudad, se manifestó de acuerdo en que la Justicia argentina necesita cambios y una democratización en sus estructuras, pero subrayó que la forma de hacerlo es en base al diálogo entre todos los sectores y, fundamentalmente, promoviendo la formación tanto de los jueces como de los abogados y mirando los ejemplos de otros países. “Estamos hace aproximadamente ya doce o catorce años desarrollando este sistema de clases y lo hacemos la Sociedad Argentina de Derecho Laboral -que yo presido- y la Universidad Tres de Febrero, a través de la organización y maestría de Julio Grisolía. Trabajamos también con otros profesionales de la enseñanza y del derecho. El objetivo fundamental de nuestro trabajo es difundir la importancia del derecho de trabajo y de qué manera puede conducirnos no sólo a la paz laboral, sino también a la paz social”, indicó.“Yo creo que estamos en un momento realmente de coyuntura, es decir, creo que nadie niega la necesidad de una reforma en la Justicia argentina, pero en lo que sí hay diferencias es en la forma de llevarla a cabo. Hace falta un diálogo importante entre los distintos sectores, para llegar a un consenso y alcanzar verdaderamente cambios, por ejemplo, una Corte plural donde haya un laboralista. ¡Hace años que no tenemos un laboralista en la Corte Suprema! ¡Hace falta una organización distinta!”, resaltó la prestigiosa camarista en declaraciones a PRIMERA EDICIÓN. “Tal vez podríamos -ejemplificó- aspirar a tener una Corte de constitucionalidad, como tienen España, Guatemala y otros países; hay muchas cosas que se pueden hacer para modernizar, hay la posibilidad de algunos procesos orales -algunos se han concretado-; esta modificación legislativa esperemos que rinda frutos”. “Hay que democratizar la Justicia, no hay dudas, pero esto no quiere decir lanzarla a las calles ni dejarla en manos inexpertas, ni nada por el estilo, hay que insistir en la formación de los jueces. Los jueces tienen que entender que mientras son jueces tienen que seguir formándose, que no todo en su vida está dicho y aprendido; y al mismo tiempo, hay que mirar los distintos sistemas del mundo y hay que insistir también en la formación de los abogados”, afirmó Ferreiros.Aprender y dialogar“Tenemos que traer la mayor cantidad de catedráticos posible, y esto no quiere decir que vamos a hacer lo que nos digan, pero vamos a escuchar, a aprender, a dialogar. Tenemos que tomar las experiencias y cuanto mejor sea la Justicia, más posibilidades de desarrollo tenemos de la democracia. No puede haber una verdadera democracia sin una Justicia que esté a la altura de las circunstancias”, dictaminó la magistrada, que dictó el seminario en Posadas en el marco de las actividades preparatorias del Congreso de Derecho Laboral que se llevará a cabo del 12 al 14 de noviembre en el hotel Hermitage de Mar del Plata. Ferreiros también opinó sobre la situación laboral tras los procesos de precarización de los años 90: “Hubo momentos de crisis importantes, es cierto que tuvimos una caída del porcentaje de trabajadores, un aumento de la desocupación y la informalidad, pero eso está siendo ampliamente superado. En los últimos años, hemos bajado enormemente el índice de desocupación hemos aumentado la formalidad y se está difundiendo la formación de los trabajadores y la responsabilidad social empresaria, que es fundamental para que haya un equilibrio”.Mandato constitucionalLa funcionaria judicial observó que la distribución equitativa de la riqueza “es mandato constitucional y es mandato de los tratados internacionales de Derechos Humanos” y remarcó que el Derecho del Trabajo “es una disciplina fundamental para la obtención de esa distribución, de manera que ése es también uno de nuestros objetivos. No creemos que todo sea mala fe y búsqueda de beneficios excesiva; no: a veces hay un desconocimiento de los derechos, a veces hay una mala información, por eso es importante que difundamos a la gente -tanto trabajadores como empresarios- los derechos que tienen y a los profesionales la mejor manera de asesorarlos. Si es necesario, hay que ir a la Justicia, litigar y hacerlo cumpliendo los mandatos constitucionales y de derecho internacional”. Nuevo Código del TrabajoSobre la reforma reciente del Código Civil, resaltó la magistrada: “Tenemos hasta 2016 para estudiarlo y ver cómo nos manejamos después de haber tenido durante tanto tiempo la obra genial de Vélez Sarsfield. Ahora se han unificado el Código Civil y el de Derecho Comercial, hay algunos detalles de derecho civil que no han tenido en cuenta la autonomía del derecho del trabajo, pero llegado el momento, los laboralistas nos encargaremos de hacer prevalecer la autonomía de nuestra disciplina”. “Aspiramos a tener un Código de Trabajo, porque se ha dictado y reformado el Código Civil, el Código Penal y se está reformando el Código Procesal Penal, y nosotros, en el Derecho del Trabajo, no tenemos Código; se van a cumplir ahora 40 años de la Ley de Contrato de Trabajo, justamente este año”, enfatizó.Al opinar sobre los cambios necesarios en la legislación laboral, afirmó Ferreiros que “efectivamente, ya la Ley de Contrato de Trabajo -que es un instrumento que ha sido enormemente útil y sigue siendo- le ha quedado chica al Derecho del Trabajo. En el congreso en Mar del Plata, uno de los paneles justamente va a estar dedicado a recordar estos 40 años de la Ley de Contrato de Trabajo y la necesidad de una nueva legislación”.“Nos encontramos -prosiguió- con un montón de leyes desperdigadas, hace falta unicidad en la legislación, hace falta que esté coordinada. En un Código de Trabajo nosotros podríamos tener la Ley de Accidentes de Trabajo, la Ley de Contratos de Trabajo, la Ley de Jornada… en fin, todas las normas de una manera orgánica, que es lo que se necesita”, opinó.“Los nuevos tiempos requieren nuevas leyes, esto es cierto, y han cambiado mucho, se han transformado mucho los sistemas de trabajo, el respeto por la dignidad del trabajador se ha elevado muchísimo, los tratados internacionales traen nuevas formas y esto, como decía, hay que volcarlo en una nueva legislación. Si no, quedaríamos en un verdadero atraso, eso no podemos permitirlo, de manera que en ese sentido es que estamos trabajando desde las aulas, los congresos y nuestras publicaciones”, finalizó la camarista. &ldquo
;Insistir en.la formación”“El objetivo fundamental de nuestro trabajo es difundir la importancia del derecho de trabajo y de qué manera puede conducirnos no sólo a la paz laboral, sino también a la paz social. Los trabajadores son un factor importantísimo dentro de una sociedad, pero también hay que reconocer que no hay trabajadores si no existen empresas. Empresas y trabajadores forman un equilibrio, hacerles conocer a ambos los derechos que tienen y la forma de defenderlos y mantenerlos de la mejor manera, ése es nuestro objetivo. Lo hacemos de una manera plural, como especialistas, no nos dirigimos únicamente a los abogados, sino también a los economistas, a los contadores, a los sindicalistas, a los empresarios, para que entre todos podamos sanar el entretejido laboral de la sociedad, que a veces está enfermo porque hay muchos casos de fraude, de informalidad, de no registración o mala registración, de salarios inadecuados, de infidelidades jurídicas que puede haber de ambas partes. Estamos ya hace muchos años recorriendo todo el país, no sólo en Buenos Aires sino también en el interior, a través de la maestría y las diplomaturas”, resumió la camarista Ferreiros.





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