POSADAS. Poco después de las 18, inició la gran fiesta de los estudiantes con la apertura de los ganadores de la Estudiantina del año pasado: los chicos del Instituto Beato Arnoldo Janssen. Los jurados dispuestos en dos palcos del cuarto tramo de la costanera posadeña se mostraron atentos a la propuesta ofrecida por cada colegio.El cielo encapotado cubrió la ciudad y el viento soplaba fuerte mientras caía la tarde. De fondo los acordes al ritmo de chanchas, redoblantes y cajitas. Pero los estudiantes mostraron alegría, y sin mirar al cielo dejaron en la primera noche toda esa energía volcada durante meses de ensayo.Sobre la avenida se vieron cientos de historias que invitaron a conocer culturas, a recordar anécdotas, a pensar que el arte creativo dejó sobrepasar la admiración del público. Esta edición se va marcando con creativos aportes de instrumentos musicales que se van incorporando para hacer sonar aún más fuerte a la banda de música. Tal así que se pudo destacar el lujo de un solo de violín de la Escuela Normal 10, o el saxo de la Escuela Normal Estados Unidos de Brasil.Pero lo cierto es que cada uno de los miles de jóvenes que intervienen en esta fiesta colocaron una cuota muy importante en creativa alegría. Notable también fueron las carrozas que sumaron un colorido y se impusieron sobre todos los otros rubros que se evalúan en esta gran fiesta. Para hoy y si el tiempo acompaña, la fiesta volverá a comenzar a las 18.





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