POSADAS. Una menor de ocho años, que cursa el tercer grado en una escuela religiosa de esta capital, se convirtió ayer en la quinta alumna que declaró ante la Justicia haber sido abusada por un docente en dicho establecimiento educativo, según confió un vocero del caso. Esto se pudo establecer mediante el relato de la víctima, que se concretó mediante el sistema de Cámara Gesell, un recinto especialmente acondicionado para que los niños sean entrevistados por psicólogos del Poder Judicial. Las fuentes revelaron que la chiquita ingresó al lugar a las 16.30 y que durante varias horas brindó su testimonio, donde quedó de manifiesto que el acusado -actualmente detenido- también abusó de ella. Según lo dicho por la menor, explicaron los voceros, quedó evidenciado que la nena fue víctima de tocamientos en un cuarto aledaño a la sala de computación y que funcionaba como biblioteca. Lo hacía en forma individual con este nena también, es decir, que se reitera el modus operandi que refirieron las demás chiquitas. Es coincidente y el dato no es menor, dijeron los informantes. En las próximas horas declararán otras dos alumnas de la escuela donde se produjeron los vejámenes, según las numerosas denuncias que radicó un grupo de padres. El profesor de informática, de 48 años, por ahora es investigado por el presunto delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por ser encargado de la educación de las víctimas”. Por el momento son diez las denuncias que pesan sobre él, ocho de las cuales ya fueron judicializadas. Mientras tanto, en el Juzgado de Instrucción 2 de Posadas, que sigue la investigación de la causa, se aguarda que dos sobrinas del sujeto radiquen denuncia, tras hacer declaraciones y acusaciones públicas (dijeron que eran abusadas por el docente cuando eran pequeñas). El hecho salió a la luz el 22 de agosto pasado, cuando cuatro padres radicaron denuncia por los abusos de sus hijitas. Luego hubo una seguidilla de acusaciones y el caso se convirtió en un verdadero escándalo que golpeó a la citada comunidad educativa religiosa, emplazada en el barrio Guazupí de la capital provincial.
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