POSADAS. A pesar de que el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) aseguró en un comunicado que desde la Nación les negaron estar estudiando un posible cierre a las exportaciones de yerba mate para buscar mayor oferta del producto y que los precios en góndola bajen; se mantiene un estado de alerta en momento donde se sigue discutiendo la grilla de precios que regirá desde septiembre.El exdirector del Inym y dirigente de la Asociación de Productores Agrarios de Misiones (Apam), Carlos Ort aseguró a radio Continental de Buenos Aires que la versión “nos extrañó y generó un revuelo bárbaro. Por eso, desde el Instituto hablaron con funcionarios de Comercio Interior y de la Dirección General de Exportaciones y se desmintió absolutamente todo”.De estar planeando la medida, ¿los funcionarios lo admitirían a los principales afectados?“Para nosotros, hay un dicho que dice ‘cuando el perro ladra, algo viene’. Por eso esperamos que no hayan escondido nada. Sería lamentable una medida de este tipo. Cuando apenas comienza a mejorar o comienza a haber un pequeño panorama de mejoría, nos toparíamos con una medida de este calibre que afecta absolutamente al productor”, agregó Ort en declaraciones radiales. Respecto al consumo, dijo que el “consumo interno va a seguir como siempre. Seguimos sosteniendo el porcentaje histórico. Un 90% de insumo interno y un 10% de exportaciones. Quizás haya aumentado un poco más la exportación, como la producción”, aseguró.El dirigente de la Apam de Oberá, advirtió respecto a un posible freno a las exportaciones que “simplemente con que se limite el 10% de las exportaciones, se desequilibraría la oferta y la demanda. Sería lamentable. Otra vez volveríamos a estar con valores de mercado por debajo de los fijados por el Inym que hoy son superiores a los oficiales”, sostuvo.En lo personal, ratificó que si la Nación avanza con lo que todavía es una versión, sería algo absurdo, hay costos (de producción, de comercialización, de industrialización, etc). La mayoría de las cadenas productivas está trabajando al límite, entregando la producción a un precio razonable y económico que nos permita subsistir. Ahora, los precios en góndola no van a bajar, están minimizados a su máxima expresión no hay posibilidades de seguir bajando sino alguien de la cadena yerbatera va a sucumbir y así se terminaría la producción”, aseguró Carlos Ort en su intervención a la radio porteña.




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