GARUPÁ. Una mujer identificada como Magdalena Barrios (42) denunció que al menos cuatro bomberos pertenecientes a la Policía de Misiones le propinaron una brutal golpiza a su hijo de 22 años, quien es discapacitado. El lamentable episodio, que vuelve a poner en tela de juicio al accionar de los uniformados con los demorados o detenidos, se registró, siempre de acuerdo a la denuncia, el pasado sábado a las 2. A esa hora, el joven se hallaba consumiendo bebidas alcohólicas en la vereda junto a otros conocidos cerca del comedor del barrio Santa Clara de Garupá. En determinado momento, dijo la mujer, se presentaron cuatro efectivos del cuerpo de bomberos -cuyo destacamento se encuentra en las cercanías- y observaron que todos los jóvenes corrieron, mientras que el muchacho discapacitado se quedó en el lugar, ya que según manifestaciones de la madre, no tenía porqué evadir a las autoridades. Fue entonces que los uniformados, indicó la denunciante, tomaron del pelo a su hijo y lo arrastraron varias cuadras, con los pantalones bajos porque le quitaron el cinturón. Luego agregó la mujer que lo patearon en el rostro y en distintas partes del cuerpo, acusándolo de que estuvo tirando piedras. El joven, quien recientemente sufrió la amputación de dos dedos, fue alojado luego en la comisaría Quinta.





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