BUENOS AIRES (NA). El Gobierno pidió al juez neoyorquino Thomas Griesa una “medida suspensiva” de la sentencia que obliga a la Argentina a pagar a los fondos buitres, en un escrito en el cual advirtió que un rechazo a su pedido puede hacer caer en default la deuda reestructurada y en el que se compromete a negociar el pago con los acreedores.En su perfil de Facebook y bajo el título: “Dialogando de buena fe”, la presidenta Cristina Kirchner difundió el escrito que los abogados de la Argentina le presentaron al magistrado neoyorkino. El pedido fue anunciado por el ministro de Economía, Axel Kicillof, pocos minutos antes de que el juez norteamericano designara al abogado Daniel Pollack como mediador en el conflicto.“Solicitamos una medida suspensiva de la sentencia, que es aquella que obliga a pagar el total de lo adeudado a los fondos buitres al momento de hacer el próximo pago de vencimiento de la deuda argentina (reestructurada) que ocurrirá el 30 de junio”, dijo Kicillof al efectuar el anuncio.El pedido es el mismo que se había presentado en octubre de 2012 en la Corte de Apelaciones de Nueva York y que ese tribunal hizo caer la semana pasada, tras el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos, que denegó la solicitud argentina de revisar esa sentencia.“Queremos esta medida para que la Argentina pueda continuar pagando normalmente a los bonistas de la reestructuración y en paralelo que podamos llevar un diálogo en condiciones equitativas, justas y legales”, explicó el ministro. Kicillof aclaró que el Gobierno necesita “poder pagar el próximo vencimiento” de los bonos Discount por unos 900 millones de dólares a los tenedores que habían ingresado a los canjes de 2005 y 2010 propuestos por el país. El ministro dijo que la Argentina acordó con los acreedores que aceptaron los canjes condiciones que están en los contratos y que ahora el Gobierno “quiere seguir cumpliendo”.“Además, hay condiciones que señalan que no se le puede pagar a otros acreedores más que lo que se les paga a los que entraron al canje”, dijo el funcionario en referencia a la denominada cláusula Rufo, que vence en diciembre de este año. Al presentar la carta que le enviará al juez neoyorquino, el ministro de Economía ratificó que el Gobierno quiere cumplir con “el 100% de los bonistas”, en línea con lo expresado por la presidenta Cristina Kirchner en el acto por el Día de la Bandera el viernes último.“Queremos pagarle al 100% de los bonistas en condiciones equitativas, justas y legales, en el marco de la Constitución, de las leyes y de los contratos que asumió con los bonistas reestructurados”, enfatizó el titular del Palacio de Hacienda.La presentación argentina advierte que “no está en condiciones de pagar a los demandantes en su totalidad a algunos acreedores y no a otros”.El país señaló también que no puede violar la denominada cláusula RUFO, que la obliga hasta el 31 de diciembre a no pagar al contado la deuda en default ni otorgar a los deudores mejores condiciones a la que otorgó en los dos canjes de deuda del 2005 y el 2010.“Queremos negociar de buena fe”En la nota elevada al juez, la Argentina puntualizó que “tiene la voluntad de negociar de buena fe”. “La República Argentina respetuosamente solicita una medida suspensiva (‘stay’) de los Amended Injunctions (medidas cautelares) que le permita entablar conversaciones con los demandantes en un plazo de tiempo razonable para este tipo de negociaciones”, dice el párrafo inicial de la carta. Luego, el texto oficial resaltó los entendimientos alcanzados con la empresa Repsol, en el CIADI y con el Club de París, como prueba de que el Gobierno argentino pretende alcanzar un acuerdo. “Argentina quiere salir de los litigios que han cargado sobre ella y sobre las Cortes. Por ello, respetuosamente solicita un stay de su Señoría. Un stay proporcionaría un resguardo (un ‘paraguas legal’) para que las negociaciones tengan lugar considerando las complejidades legales y financieras inherentes al proceso”, se insistió en la presentación a Griesa. Asimismo, sostuvo que la Argentina no está en condiciones de pagarle “a todos los acreedores el total de capital e intereses cuando realiza un pago de intereses sobre su deuda reestructurada”. ¿Quién es el mediador?Daniel Pollack es el abogado que trabajará para el juzgado de Thomas Griesa como nexo entre Argentina y los holdouts.El designado asistente de Thomas Griesa en la saga de los holdouts es Daniel Pollack, ampliamente reconocido como uno de los abogados litigantes más prominentes de los EEUU en litigios financieros, asesor de empresas en temas de gobierno corporativo y de ejecutivos en los contratos de trabajo y acuerdos de salida.Este abogado cobrará sus honorarios por parte de la Argentina y de Elliott (abonarán el 50% cada uno), y no tendrá decisión alguna sobre el fallo de Griesa. O sea, no servirá tratar de congraciarse con Pollack ya que su trabajo será monitorear la marcha de las negociaciones, pero sin injerencia alguna.Pollack, quien ahora tendrá que lidiar con los abogados de Cleary Gottlieb Steen & Hamilton (los de Argentina) y de Elliott (Robert Cohen y Cía.), obtuvo una licenciatura, magna cum laude, de la Universidad de Harvard, y recibió una Maestría en Filosofía, Política y Economía de la Universidad de Oxford y de la Escuela de Derecho de Harvard. Fundó y dirigió una conocida firma legal, Pollack y Kaminsky, y se asoció a McCarter en 2009. El 2 de mayo de 2012, Pollack fue nombrado socio director de la oficina McCarter & English en Nueva York.Durante el curso de su carrera, Pollack ha participado en más de 20 juicios con jurado civil y más de 30 juicios sin jurado. Ha actuado como abogado de apelaciones en numerosos tribunales de apelación federales y estatales, es miembro del Colegio de Abogados de la Corte Suprema de los EEUU y es miembro del Colegio de Abogados. Ha tenido como clientes a T. Rowe Price Associates, Franklin-Templeton, AIM, Fidelity, Wells Fargo Bank, UBS Asset Management, la PNC Advisors, PNC Bank NA, J & W Seligman y Ameriprise. “Quieren apropiarse de activos”BUENOS AIRES (NA). El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó que “hay intereses ocultos” que buscan “apropiarse de activos reales y financieros de la República Argentina”.“Detrás de esta cuestión hay intereses ocultos que tienen que ver con la perspectiva de apropiarse de activos reales y financieros de la República Argentina”, señaló Capitanich.El funcionario se pronunció de esa forma al ser consultado sobre declaraciones del presidente uruguay
o, José Mujica, quien vinculó la acción de fondos buitres con estrategias para quedarse con yacimientos petrolíferos del país.Capitanich afirmó que el Gobierno apunta a la “defensa irrestricta de bienes estratégicos”, entre las que mencionó yacimientos de petróleo, “reservas estratégicas” de minerales y agua dulce.En ese contexto, el funcionario sostuvo que “el pueblo argentino tiene que estar unido y el Gobierno debe inexorablemente defender el interés nacional, como lo hace, esto es defender el patrimonio público”.En otro pasaje de su exposición, Capitanich destacó que durante este fin de semana Argentina recibió “un nutrido marco de apoyo desde el punto de vista político e institucional”, destacando la postura del presidente Mujica, incluido el Mercosur, Unasur y “en general distintos foros que han opinado favorablemente en apoyo en este proceso de negociación, hasta un diario como el New York Time”. “Argentina obviamente tiene condiciones estratégicas a nivel internacional, reservas estratégicas en materia de minería, potasio, litio, oro, plata y cobre, por citar algunos, hasta el segundo y cuarto yacimiento de shale gas y shale oil”, recordó el funcionario.Por otra parte, insistió en la “necesidad de una opinión del Poder Judicial, primero, porque es necesario considerar que en un país soberano como la República Argentina debe expedirse”, sobre la deuda con los fondos buitres.





Discussion about this post