ITUZAINGÓ (Corrientes). Una adolescente de 17 años fue detenida acusada de asesinar y enterrar a su beba recién nacida, para que “dejara de llorar”. El aberrante caso se registró en la vecina localidad correntina de Ituzaingó, según publicó ayer el diario El Litoral de esa provincia.La joven se encuentra internada en el hospital local con custodia policial y a disposición de la Justicia.De acuerdo a la autopsia practicada al cuerpo de la criatura, la muerte se produjo por “acción traumática”, informó la policía. Según los peritos, la indefensa víctima recibió un fuerte golpe en la cabeza y falleció.El hecho salió a la luz el pasado jueves, pero recién trascendió el domingo último, cuando unos niños que jugaban en el patio trasero de una vivienda encontraron a la beba semienterrada. Momentos antes, un perro desenterró partes del feto, lo que posibilitó que fuera descubierto el pequeño cuerpo. Uno de los chicos le avisó a su madre, quien de inmediato se comunicó con la Policía. El macabro hallazgo fue en una propiedad situada en la intersección de las calles Bernardino del Valle y Sarmiento del barrio Tabay, de esa turística localidad.Con una orden de allanamiento un grupo de policías ingresó al domicilio en cuestión. Dentro del patio interno -posterior a la vivienda- constataron lo denunciado y encontró semienterrado el cuerpo de la beba. Por directivas judiciales los restos fueron trasladados hasta el Instituto Médico Forense, que funciona en la capital de Corrientes, en donde se le practicó la autopsia médica legal correspondiente, que determinó que el cuerpo era de un recién nacido de sexo femenino, con causal de muerte por “acción traumática”.Una vez al tanto de los reultados que arrojó la autopsia, los uniformados locales comenzaron la pesquisa de rigor y de esta manera pudieron identificar a la madre de la criatura, una adolescente de 17 años.De la investigación surgió que la menor habría dado a luz a su hija en el domicilio allanado y luego de un par de días lo enterró en el fondo de su casa.Según las pruebas con que cuentan los investigadores, se sospecha que la beba recibió un fuerte golpe en la cabeza para que “deje de llorar”. La lesión le ocasionó la muerte y se decidió esconderla dentro de una mochila debajo de una cama. Luego la víctima habría sido envuelta en una sábana de color rojo y colocada en un pozo de poca profundidad que habría sido cavado con una cuchara. La madre de la beba se encuentra internada en el Hospital Ricardo Billinghurst. El director del nosocomio, Javier Tamburini, dijo que al ingresar la jovencita presentaba “un cuadro de una severa hemorragia”, y que “a partir de allí se hicieron muchos estudios y ayer a la mañana entró al quirófano porque había que sacar cierto material que había quedado en la vía uterina y en estos momentos está compensada y estable, pero se le tienen que realizar otros estudios médicos”.“Presumimos que fue un parto casero o en domicilio y se sucedió una serie de hechos que llevaron a que este feto a término haya fallecido”, dijo el médico en declaraciones a Encorcable. El facultativo también confirmó que la joven había sido controlada por médicos locales durante la etapa de gestación.





Discussion about this post