TUCUMÁN (Medios digitales). Un dantesco escenario hallaron ayer a primera hora los policías de esta provincia, cuando encontraron en una casa ubicada a unos 45 kilómetros al suroeste de la capital tucumana a Edith del Valle Trejo, una mujer con alteraciones mentales, y a su hijo Jeremías Gómez, de tres años, sobre un enorme charco de sangre.El comisario Guido Salas, titular de la Unidad Regional Oeste de la Policía de Tucumán, explicó que “la abuela del pequeño fue a la casa alrededor de las 8.30 para ver a su hija que padece alteraciones mentales y estaba sola porque su esposo se fue a trabajar a Salta, pero cuando llegó se encontró con una escena macabra”. “Primero intentó ayudar al pequeño y, de inmediato, llamó al personal policial que trasladó a ambos al hospital, donde se constató que el niño había fallecido y se decidió derivar a la mujer al centro asistencial de Concepción”, agregó el comisario.El chico ingresó con heridas al hospital de Monteros, pero falleció antes de que pudiera ser asistido por los médicos.Los investigadores determinaron que el niño fue atacado por su propia madre, quien luego intentó suicidarse provocándose cortes en distintas partes del cuerpo.El hecho seguía conmocionando por estas horas a esa ciudad, que se encuentra en el sur de la provincia de Tucumán. Detenida y con heridas que serían de gravedad, la mujer, de 36 años, fue trasladada por personal policial al centro asistencial de la zona y desde allí fue derivada al hospital de Concepción, bajo una fuerte custodia, se señaló. Los primeros datos indican que el niño habría recibido al menos dos heridas mortales con un arma blanca.





Discussion about this post