BUENOS AIRES (NA). El conflicto en la autopartista Gestamp se agravó ya que la empresa decidió licenciar a todo el personal e impidió el ingreso de operarios, mientras que el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) apuntó contra el Partido Obrero (PO) y advirtió que la compañía “va a agarrar las valijas y se va a ir a la mierda”.Pese a la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo bonaerense, la situación se complicó y surgieron acusaciones de motivaciones “políticas” en la protesta y de estar impulsada por el Partido Obrero. Ricardo Pignanelli, titular del gremio de los mecánicos, directamente responsabilizó al PO por los 67 despidos mientras que el Gobierno nacional calificó de “inadmisible” la actitud de los trabajadores que bloquearon el ingreso y ocuparon la planta.“Es como el cuento del pastor y la oveja. Ahí se van a dar cuenta que el derecho es una cosa y el delito es otra. Quieren venir por la torta con la velita. Despidos no teníamos, lo provocaron esos muchachos del Partido Obrero”, subrayó.En declaraciones a Radio Rivadavia, Pignanelli cuestionó con dureza la presencia del PO y de “nietos de desaparecidos” en las puerta de la fábrica ubicada en la localidad bonaerense de Escobar.Al ser consultado sobre lo que sucederá si el PO vence en las próximas elecciones gremiales fue terminante: “Si la gente elige la anarquía me voy a jubilar y me voy a cuidar a mis nietos. En anarquía no se hace ninguna República y estos muchachos bordean la anarquía”.En medio de la fuerte tensión en la autopartista de Escobar, el sindicalista fue tajante: “Acá no hay conflicto gremial. Esto es una prueba piloto que el PO está empezando a hacer en las autopartistas”.El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, calificó de “inadmisible” que las acciones “políticas” en el conflicto impidan la actividad en la industria automotriz, y convocó a las autoridades bonaerenses a asumir las “responsabilidad” para resolver el conflicto. El funcionario hizo un llamado, sin nombrarlo al gobernador Scioli, para que “las autoridades asuman sus responsabilidades” y “ejecuten las acciones desde su competencia y se ocupen de la gestión” para resolver el conflicto gremial.Los trabajadores despedidos de la autopartista se hicieron presentes durante la mañana en la puerta de la fábrica para volver a sus puestos laborales, “pero su reingreso a la planta se vio obstaculizado porque la compañía licenció a todos sus empleados aduciendo razones de limpieza e higiene de la planta”.Así lo alertaron desde el Partido de los Trabajadores Socialistas y el Nuevo MAS, quienes distribuyeron comunicados de prensa para denunciar la situación en la multinacional Gestamp. Roberto Amador, uno de los trabajadores despedidos, comentó que “la empresa está maniobrando para no cumplir la conciliación obligatoria”.
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