BUENOS AIRES (NA). El titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, se refirió a la complicada situación legal de Amado Boudou por la causa Ciccone y reclamó una rápida definición del tema. Uno de los referentes del kirchnerismo sorprendió ayer al manifestar su inquietud por la situación legal de Amado Boudou, quien es investigado como autor del delito de negociaciones incompatibles con la función pública por la compra de la empresa Ciccone Calcográfica.“Lo mejor es que esto se resuelva lo más rápido posible. Dos años sin una resolución a nadie le hace bien, pero mucho menos al país que el vicepresidente esté todos los días en la tapa de los diarios”, admitió Domínguez en declaraciones al programa Toma y Daca de Radio América.La expresión sorprende porque se produce en un momento complicado para Boudou, quien acaba de sufrir un revés: la Justicia puso en marcha la cuenta regresiva hacia un desenlace al rechazarle su pedido de sobreseimiento. Boudou se defendió en “6-7-8”(Medios Digitales). El vicepresidente Amado Boudou defendió su postura en el programa oficialista 6-7-8, a pocas horas de que la Cámara de Casación Penal rechazara su sobreseimiento. Tras el fallo, hasta el momento, ningún integrante del Gobierno había salido a hablar de su comprometida situación judicial.Luego de un informe donde se cuestionó la cobertura mediática del caso, el propio Boudou manifestó: “La investigación que está en curso. Yo me presenté en el juzgado para decir que estoy para lo que se necesite”.“No hay ningún peso mío dando vueltas alrededor de Ciccone. Y yo no hice nada a favor de la empresa para levantar la quiebra. La hipótesis de que Ciccone es mía… primero que es del Estado, pero además, [Alejandro] Vandenbroele no tiene ningún bien, así que no puede ser testaferro de nadie”, argumentó. “Esta es una posición individual que voy a defender solo. No soy de aquellos que involucran sus cuestiones personales con la política”.





Discussion about this post