BUENOS AIRES (NA). La economía quedó “al borde de otra devaluación” pero el Gobierno nacional no solucionará nada depreciando de nuevo el peso, como lo hizo en enero, si no toma “medidas de fondo”, advirtió el economista de Inversor Global Diego Martínez Burzaco.“Parecería que el Gobierno es como un perro que se muerde su propia cola, porque no está corrigiendo nada y con medidas coyunturales no va a resolver la cuestión del fondo de la crisis”, sostuvo el especialista.En diálogo con NA, el economista señaló que el país está “en estanflación básicamente porque crece a una tasa inferior al 1% anual, que es ínfima, y porque el crecimiento es real cuando se supera el 3%”.“Tenemos un nivel alto de inflación y con altas tasas que frenan el consumo, que es una de las principales variables del modelo”, señaló.“La devaluación contribuyó a una suba de tasas y se cortó el financiamiento al consumo, que además se encareció”, añadió.Advirtió que “muchos sectores que en años anteriores eran impulsores de la economía se han estancado, como la producción de autos que cayó más del 30%, la construcción en decrecimiento, muchas empresas están hablando de suspensión de personal, lo que a su vez trae mayor incertidumbre en los planes de consumo”.Sostuvo que en el primer trimestre del año el déficit fiscal “lo llevó a limitar la expansión monetaria, que era lo primero que aparecía cuando el gasto privado se caía para compensar el consumo”.Consideró que “el único sector fuerte es el agrícola por la mejor cosecha, pero no tiene un efecto derrame para el resto de la economía”.“Habrá que ver si con los aumentos salariales de las paritarias se recobra el nivel de actividad por más consumo, aunque con el nivel de incertidumbre que hay no será explosivo en el corto plazo”, dijo. Agregó que “la inflación ya se comió la mitad de la devaluación, con lo que consumió ya la mitad del efecto inercial de la medida y de esa manera ya tampoco tenés la mejora en el salto competitivo que buscaba el Gobierno”.





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