BUENOS AIRES (NA). El entrenador de Boca, Carlos Bianchi, decidió ayer no utilizar a Juan Román Riquelme en el entrenamiento del plantel para resguardarlo físicamente, aunque podría estar presente en la visita del domingo a Quilmes, por la novena fecha.En una maniobra que se refirió más a la precaución que a otra cuestión, Bianchi no incluyó a Riquelme en la parte más intensa del entrenamiento para no abusar de las bondades que está mostrando su físico. Si bien al enganche y principal generador futbolístico de Boca se lo ve bien, el entrenador prefiere evitar cualquier tipo de disgusto. Más aún teniendo en cuenta la seguidilla que arrastra el enganche, que viene de tres partidos consecutivos de titular, y el último lo jugó entero. Por eso, ayer Riquelme participó en la primera hora de práctica con el resto del plantel pero después no fue parte del fútbol reducido que dispuso el “Virrey”.Del “9 contra 9” tampoco participó Federico Bravo, quien será el mediocampista central ante Quilmes, ya que Cristian Erbes está suspendido. En el táctico, Bianchi paró de un lado a Agustín Orión; Hernán Grana, Claudio Pérez, Juan Forlín, Emiliano Insúa (la defensa que jugará el domingo); Fernando Gago, Adrián Cubas; Juan Manuel Martínez y Claudio Riaño.Del otro, estuvieron Sebastián D’Angelo; Daniel Díaz, Juan Cruz Komar, Leandro Zárate; Gonzalo Escalante, Cristian Erbes, Nicolás Colazo, Juan Manuel Sánchez Miño; Luciano Acosta y Emmanuel Gigliotti.Ahí se mezclaron las dos partes del equipo que Bianchi planea presentar de entrada ante el “Cervecero” el próximo domingo con Orión; Grana, Pérez (en reemplazo del suspendido “Cata” Díaz), Forlín e Insúa; Gago, Bravo y Sánchez Miño; Riquelme; Luciano Acosta y Gigliotti.





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