ELDORADO. El Servicio Penitenciario Provincial (SPP) solicitó a la Justicia que disponga el inmediato traslado del ciudadano chileno, detenido en la prisión de esta ciudad por su vinculación con dos robos a mano armada, a la cárcel de Loreto debido a los inconvenientes que ocasiona con otros internos debido a su mala conducta.Se trata del mismo hombre cuyo padre denunció supuestas torturas de parte del personal penitenciario hacia su hijo, que motivó la apertura de una causa judicial y posterior allanamiento de la UP III, el sábado pasado.PRIMERA EDICIÓN mantuvo una entrevista telefónica con el director del SPP, alcaide general Miguel Ángel Maidana, quien manifestó “bienvenido sea que allanen la UP III, así queda claro que no hubo apremios ni torturas”.El funcionario aclaró que, tras el procedimiento autorizado por el juez Juan Pablo Fernández Rissi, “no hay personal sumariado ni con causa abierta por esta denuncia”.Esto quiere decir que en el allanamiento no se encontraron elementos de relevancia para la investigación.El padre del joven presentó un recurso de Hábeas Corpus ante el titular del Instrucción 3 de Puerto Iguazú.Una fuente de la causa indicó que “es otro más de los que ya presentó en distintas instancias y todos fueron rechazados”, indicó.Según informes del SPP, el detenido chileno tuvo problemas de adaptación y conducta desde que ingresó a la cárcel de Eldorado.Incluso, en medio de una reyerta interna, habría fracturado el brazo a otro recluso de un palazo.El lesionado, después de ser atendido, se negó a radicar denuncia contra el agresor. Y no es para menos, detrás de las rejas hay códigos cuya violación se puede pagar con la vida.El SPP también indicó que hubo agresiones hacia los mismos custodios. Por todo esto, el objetivo de su traslado a Loreto es que pueda ser alojado en el Pabellón de Contención y así lograr su adaptación al sistema carcelario provincial.La misma fuente indicó que, tal vez, la intención del chileno es ser expulsado de la Argentina para regresar a su país. Una frase de películaCuando el policía ingresó al subsuelo del local, vio al criminal que apoyaba el cuchillo en el cuello del propietario de la tienda de modas que acababa de asaltar.“Si veo una gota de sangre en el suelo te va a ir mal”, le habría advertido el uniformado apuntándolo con la pistola reglamentaria.Por fortuna, el ladrón desistió de su accionar y la situación no pasó a mayores.El chileno fue detenido y luego procesado por dos asaltos. El primero, ocurrido el 24 de octubre pasado, fue en una óptica de Iguazú. Se llevaron pocos pesos pero soportes y anteojos por $150.000.El segundo ocurrió 7 de noviembre, en una boutique. En ambos casos tomaron del cuello y a punta de cuchillo a las víctimas.
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