OBERÁ. María Luz tiene tan sólo dos años y ya soportó una compleja operación de corazón con tanto éxito y rapidez que los médicos del hospital Garrahan de Buenos Aires quedaron sorprendidos “prácticamente le hicieron de nuevo el corazón, le pusieron un parche entre los ventrículos con un pedazo de pericardio y le cerraron una comunicación arterio venosa que tenía, con eso solucionaron a su vez otras cinco patologías más por las lesiones congénitas”, contó el padre de María Luz, Daniel Ferber, un conocido vecino de esta localidad, de profesión bombero voluntario y quien por estos días disfruta de la buena salud de su hija, “aunque sabemos que no podemos estar muy tranquilos porque necesita cuidados especiales”, admitió. Si bien hace unas semanas atrás, la niña estuvo internada por un cuadro de enterocolitis, en estos momentos está en perfectas condiciones. En ese entonces, Daniel publicó en su Facebook el siguiente mensaje: “No me caracterizo por mendigar, pero por los hijos se hace lo que sea. Como la mayoría sabe, nosotros vivimos del laburo diario y en estas condiciones no lo estamos haciendo. Por eso, cualquier aporte que nos hagan será bienvenido”. La familia dispone de una cuenta en el Banco Francés, caja de ahorro en pesos 310270/6. En caso de transferencias el CBU es 0170065740000031027061. “Estaremos eternamente agradecidos”, agregó en ese mensaje el hombre. La familia Ferber está compuesta además por la mamá Andrea, y el adolescente Daniel (catorce años).La historia de saludDaniel, en una comunicación telefónica con PRIMERA EDICIÓN relató que “volvimos de Buenos el 29 de junio, a ella le hicieron un estudio el 2 de julio, luego en agosto y hasta ese entonces tenía vestigios de la operación dentro del corazón. Y en el último estudio que se le hizo en este mes y ya no se vio más nada de la operación en sí, incluso la parte estética apenas si se nota una manchita rosada”. Y añadió: “obviamente su corazón no es normal, toda patología extra, es decir cualquier cosa que agarra en el camino como digo le afecta. La semana pasada captó este virus que anda dando vueltas de enterocolitis y estuvo con estos síntomas, internada por unos diez días, pero ahora está muy bien”. La nena tenía poco más de un año cuando un médico local le detectó una cardiopatía congénita, aunque no dio un diagnóstico certero. “Cuando ella nació, lo hizo con un problema renal evidente, entonces se tardó en descubrir el cardíaco que se detectó recién a los once meses. A María Luz la trató un médico de adultos, quien no supo atenderla como corresponde, entonces se le hizo un estudio, luego otro y cómo no veíamos avance, con la pediatra de cabecera decidimos llevarla a la doctora Lidia Coronas en Posadas, quien descubrió que su enfermedad estaba muy avanzada, por lo que la mandó de manera inmediata al Garrahan. En ese momento tuvimos la suerte que se hizo todo muy rápido, pues una vez que llegamos allá ya nos atendieron de primera”, detalló Daniel. Este bombero voluntario fue uno de los primeros que sugirió comenzar una aventura solidaria para ayudar a Facundo Kurtz (el joven de Oberá que está internado en Buenos Aires con un cuadro de Leucemia). “A nosotros no nos sobra nada, incluso estamos esperamos una casa de Iprodha, necesitamos de la solidaridad de la comunidad de Oberá, ellos fueron los que más nos ayudaron y ahora también estamos trabajando para Facu”, cerró.





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