BUENOS AIRES (NA). El oficialismo aprobó anoche en el Senado el ascenso del jefe del Ejército, César Milani, a pesar de las objeciones de algunos organismos de derechos humanos que lo vinculan a la última dictadura militar.El argumento central del oficialismo para aprobar el pliego de ascenso de general de división a teniente general fue que Milani no se encuentra procesado por ninguna de las acusaciones en su contra y que prima el principio de inocencia.No obstante, votó a favor del pliego en soledad y en medio de fuertes acusaciones de la oposición, como fue el caso del radical Gerardo Morales, quien aseguró que “están haciendo tareas de inteligencia interna a través del Ejército y esa es el área de Milani”.Morales realizó esta declaración tras asegurar que él es “target” de Milani y agregó: “¿Por qué si no un Gobierno que reactivó las investigaciones sobre la última dictadura banca a un represor? ¿Por qué una decisión política tan fuerte? Esto es lo que nos preguntamos e intentamos responder”.Además, Morales indicó que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) presentó un nuevo informe sobre Milani, basado en un cuestionario que el mismo general le respondió a ese organismo presidido por el periodista Horacio Verbitsky.Morales sostuvo que ese informe del CELS señala que Milani “dijo desconocer que en el Batallón 141, donde él dormía y residía, funcionaba un centro clandestino de detención”, pero que “dijo que la represión en La Rioja fue de baja intensidad”.“No sabía que había crímenes de lesa humanidad de alta y baja intensidad”, ironizó el senador radical, quien subrayó que Milani “formaba parte de la estructura represiva, porque era subteniente, iba a buscar a quienes luego desaparecían”.A su turno, en el interbloque del Frente Amplio Progresista-UNEN Luis Juez remarcó que “nunca se alcanzó tanto nivel de prueba” contra un militar que espera acuerdo del Senado y Fernando “Pino” Solanas sostuvo que “cuando se leen las respuestas del general al interrogatorio del CELS no sólo sorprende, sino que indigna”.Uno de los defensores del pliego fue el Pablo González, del Frente para la Victoria, quien señaló que “parece que ya se lo ha juzgado a Milani, ya se lo ha tratado de genocida, esto es muy grave” y aludió así a la ausencia de un procesamiento sobre el jefe del Ejército. En medio del debate, Fernández cuestionó el argumento del macrista Diego Santilli de que el elegido de la Presidenta “no es idóneo” para encabezar el Ejército, cuando “tenemos al jefe de la Ciudad procesado por el caso de UCEP y las escuchas ilegales”. “La única causa que tiene (Macri) es por las escuchas, causa armada por el Gobierno nacional”, le retrucó Santilli.Sin embargo, Fernández le recordó el procesamiento en “la causa de la UCEP (Unión de Control de Espacio Púbico), por pegarle a los pobres en situación de calle” en más de una decena de desalojos. La impugnación del CELSEl Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), que preside el periodista Horacio Verbitsky, ratificó su impugnación al pliego de ascenso a teniente general al jefe del Ejército, César Milani.“Milani solicitó al CELS formular un descargo ante la impugnación, por lo que el organismo le envió un cuestionario con los puntos que consideró necesarios sean aclarados respecto a su rol dentro del aparato represivo del terrorismo de Estado. Sin embargo, las respuestas de Milani no disipan el cuestionamiento anterior”, señala la organización.Al respecto señala que los argumentos de Milani, por el contrario, “agregan elementos que hacen inconveniente su ascenso y su permanencia como jefe de Estado Mayor del Ejército y son contradictorias con fallos de la Justicia que tienen autoridad de cosa juzgada y con la información pública disponible sobre aquellos años”.El CELS objetó el ascenso debido a la denuncia del expreso político Ramón Olivera, que acusa al militar de apremios ilegales.La organización también apuntó la sospecha de que el jefe del Ejército podría haber participado en la desaparición del conscripto Alberto Agapito Ledo, que era su ayudante en aquel entonces.Esta sospecha se basa en que el expediente en el que Ledo figura como desertor fue firmada por el propio Milani.
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