POSADAS. Las elecciones del próximo domingo y el cierre de las campañas proselitistas fue el pretexto ideal para que, en un acuerdo de bloques, el Concejo Deliberante local suspendiera su sesión de la víspera. Aunque cabe reconocer que el temario previsto para la ocasión era escaso y de los poquísimos temas de importancia que contenía, el más destacado de ellos correspondía al dictamen que, en la semana anterior, motivó la caída del quórum de la plenaria por retiro del radicalismo (creación de la figura del depositario judicial municipal).El acuerdo que frustró la sesión ordinaria semana prevista para ayer se alcanzó en horas de la tarde del miércoles entre la mayoría de los titulares de las siete bancadas que integran el cuerpo, cuando ya habían sido distribuidos las carpetas conteniendo el orden del día. Esa posibilidad de mantener ayer las puertas cerradas del recinto, a tres días del comicio para renovar legisladores nacionales venía barajándose desde principio de semana y cobró fuerza con la idéntica actitud de la Cámara de Representantes provincial que tampoco realizó su plenaria habitual.Llama la atención esta inapropiada decisión de los ediles posadeños de silenciar la casa, ya que ninguno de ellos se postula para alguna de las tres diputaciones nacionales en juego, ni está relacionado directamente con la actividad proselitista. Aunque podría inscribirse como parte de una labor deliberativa anual de poco vuelo y en la que los temas trascendentes para la comunidad capitalina siguen siendo muy escasos, sería sólo una manera de ganar tiempo.





Discussion about this post