PUERTO RICO. Ellos son poco más de diez productores de la Zona Centro y Alto Uruguay de la provincia. Forman parte de la Cooperativa Orgánica Biodinámica y elaboran yerba mate orgánica tras recuperar viejas plantaciones que habrían sido abandonadas en la década de los 90.Actualmente la yerba es procesada en una planta situada en la localidad de Hipólito Yrigoyen. La materia prima proviene exclusivamente de los yerbales que han recuperado cinco productores de la zona.El socio fundador de la cooperativa con sede en Puerto Rico, Claudio Varela, explicó a PRIMERA EDICIÓN que allí se trabaja mucho en la recuperación del suelo. El trabajo de limpieza se lleva a cabo con machete y se utiliza específicamente abonos verdes y fertilizantes orgánicos.Varela productor, y uno de los fundadores de esta entidad, detalló a este diario que “la cooperativa comenzó a forjarse cuando el precio de la yerba no tenía valor prácticamente. Entonces juntamos unos productores y decidimos darles más valor agregado a esta producción.De a poco fuimos saliendo adelante y siempre teniendo en cuenta las características de la agricultura orgánica – biodinámica. Hemos logrado en poco tiempo tener una marca y que la yerba sea procesada por terceros”, explicó.Se trata de diez productores que tienen sus chacras entre Jardín América, Puerto Rico y otras localidades cercanas. Son parcelas muy limitadas y en total no superan catorce hectáreas aproximadamente.“Después de algunos años conocimos a personas en Puerto Rico que trabajan la agricultura biodinámica. Se trata de un proceso más avanzado que lo orgánico. Involucra mucho más a la chacra. Acá están involucradas personas que se dedican al cultivo de plantas medicinales, jugos de citrus, siempre con el objetivo de darle un valor agregado a la producción, que ellos mismos se queden en las chacras y sepan que su producto vale”, resaltó Varela.Yerba orgánicaVarela recuerda que hace una década comenzaban a aventurar la recuperación total de dichos yerbales abandonados. “Hace ocho o nueve años atrás comenzamos a trabajar en la idea, anteriormente estos yerbales no estaban en producción, sencillamente porque estaban abandonados.Las plantaciones son yerbales viejos que se han ido recuperando, actualmente la materia prima es procesada por un secadero ubicado en la localidad de Hipólito Yrigoyen. Si bien actualmente lo están envasando terceros, nuestro objetivo a largo plazo es que ese proceso ya lo podamos hacer nosotros y todo el trabajo en general”, anticipó el cooperativista.Otro de los objetivos que se plantean es ponerle un nombre al producto, “a fin de imponer no sólo la marca característica de la región y que por sobre todas las cosas sea una garantía de un producto sano”, agregó.En cuanto al costo de producción, dijo que “éste producto tiene un valor agregado por ser orgánica. Lo que es la tarefa es mucho más costosa porque es mucho más minucioso todo. En el mercado local un paquete del producto terminado está entre 23 y 25 pesos aproximadamente pero en las grandes ciudades ese valor se triplica en muchos casos”, detalló.Y finalmente destacó ser “la primera cooperativa de productores de yerba mate biodinámica en la Argentina con certificación DEMETER; único sello internacional que avala este tipo de producción. Por medio de este proyecto cooperativo, buscamos tener mayor participación de la cadena de valor del producto, y a través de nuestra imagen corporativa dar a conocer al consumidor final el trabajo intenso a favor de cuidado del medio ambiente”. De pequeños productoresEl titular de la cooperativa con sede en Puerto Rico destacó ser “una Cooperativa de pequeños productores orgánicos y biodinámicos, que buscamos fortalecer los sistemas productivos diferenciados en Misiones, dando valor agregado a la producción primaria de los asociados y comprometidos en lograr una estructura sólida basada en los principios del cooperativismo”. El cooperativista explicó que el objetivo principal “es proveer de alimentos saludables y nutritivos basados en la práctica de la agricultura orgánica y biodinámica. Además buscamos reivindicar al pequeño productor, pagando un precio justo y diferencial por la materia prima orgánica y biodinámica”. “Con esta política buscamos afianzar a los hijos de nuestros productores a la chacra, para que si lo desean, no la abandonen por razones económicas. También trabajamos por la conservación del bosque nativo y los recursos naturales, con vistas a restituir a la tierra la materia orgánica que requiere para la fertilidad de los suelos”, añadió Varela.Por otra parte agregó que “la agricultura biodinámica contempla la integración de los componentes humano, animal y vegetal, no sólo las técnicas de agricultura orgánica, sino también los efectos de preparaciones”.
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