Puerto Iguazú. Un perro entrenado en rastrear yaguaretés desde hoy colaboraría en la búsqueda del ejemplar que el domingo por la tarde fue atropellado por un colectivo y luego ingresó a la selva en el Parque Nacional Iguazú. Hasta el momento los biólogos del Plan de Acción de Conservación y guardaparques no pudieron ubicarlo. Es el segundo yaguareté atropellado en la ruta nacional 12 en menos de un año y medio.Según la información de testigos, se trataría de Yasirandí, un yaguareté que Fundación Vida Silvestre Argentina y el Centro de Investigaciones del Bosque Atlántico (CeIBA) monitorean en la selva.Agustín Paviolo, investigador del Conicet e integrante del Plan de Conservación, explicó ayer a Primera Edición que el perro es de un investigador que se especializa en entrar a los canes y colabora con biólogos en Brasil y que esperan que ubique el rastro del animal herido. Paviolo agregó que según los estudios e investigaciones realizadas a otros animales atropellados, la mayoría sufre lesiones internas, hemorragias que si bien no son fulminantes en el momento en días puede morir. Además, estimó que de tener alguna pata rota, podría pasar hambre, ya que estaría imposibilitado de cazar y no estaría en condiciones de alimentarse. El investigador estimó que por el impacto que habrá recibido por el atropellamiento de un colectivo, de dos pisos en este caso, si no está muerto el yaguareté, estaría muy lastimado. Agregó que según el aporte de testigos el animal quedó unos minutos al costado de la ruta, estiman que por el shock, hasta que se refugió en la selva. Este yaguareté era uno de los últimos 200 que subsisten en toda Argentina, y uno de los cincuenta que quedan en Misiones, por lo que su muerte significa un grave impacto en la población. Los remanentes de selva donde sobrevive la especie en Misiones están atravesados por numerosas rutas, lo que constituye una constante amenaza a la supervivencia de la especie, señalaron los investigadores. El puma sería liberadoEl puma que el lunes fue capturado en inmediaciones del aeropuerto de Posadas sigue controlado en el Centro de Recría El Puma, donde se están realizando estudios médicos para buscar liberarlo próximamente.El director del Centro, Miguel Rinas, comentó que el puma no tiene más de un año y que hace poco tiempo se habría separado de su madre y que estiman llegó hasta donde fue capturado buscando nuevos lugares a través de distintos campos. “La premisa es liberarlo”, señaló Rinas, quien agregó que analizarán el lugar y que todavía sigue siendo controlado, aunque está en buen estado de salud.





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