Sin presupuesto para los antiguos trenes

POSADAS. Quedó en  la “nada” el proyecto para restaurar y poner en valor las locomotoras “La Misionerita” y “La Posadeña”, dos piezas de alto valor patrimonial de la provincia que se derrumban frente a la Villa Cultural en la costanera capitalina. Fuentes del Gobierno provincial confirmaron ayer que este año no habrá presupuesto para cumplir la promesa de recuperarlos, y tampoco hay perspectivas para 2014, “ya que hasta ahora sólo nos formularon promesas de palabra”, lamentó la ferroaficionada, Analía Colazo quien viene denunciando el estado de abandono en el que se encuentran. “Sólo pido que se tome conciencia del valor histórico que tienen estas locomotoras, con 150 años en pie, ya que se trata de las primeras en haber llegado a Misiones”, volvió a exigir la ferroaficionada.Así las cosas, las dos piezas, con signos evidentes de saqueo, se deterioran ante la mirada atónita e impotente del club de ferroaficionados fundado en los años ‘90 por  Narciso Aguilar y Sixto Colazo. Colazo recordó que ambas locomotoras son el exponente de las primeras máquinas que unieron a la provincia de Misiones con la Capital Federal, a partir de 1914. Relató la mujer: “El Ferrocarril Nordeste Argentino fue inaugurado en 1890 operando el tramo de Monte Caseros a Curuzú Cuatiá, que luego fue extendido hasta Corrientes y Posadas.Si bien ambas máquinas se encuentran en jurisdicción municipal, esas dos piezas históricas pertenecen a la provincia, que es la que debería asumir el trabajo de su restauración, pero este año concluirá sin que suceda. Dos locomotoras que se caen a pedazos, exhibidas en la Villa Cultural del cuatro tramo de la costanera, forman parte del legado de la historia del ferrocarril en la capital provincial. Eran dos proyectos, uno de ellos inclusive proponía volver a poner en funciones a “La Posadeña”, tal como han procedido algunas otras provincias, en las cuales, las locomotoras volvieron a estar en marcha. Algo que en cualquier caso, para Colazo es improbable, ya que “son muchas las piezas que le faltan. La mayoría de la maquinaria fue desmantelada con el paso del tiempo, porque si bien hay un sereno en el lugar, no se hace demasiado para una protección concisa de estas antiquísimas máquinas a vapor, únicas en el mundo”.