EL SOBERBIO. El suspendido intendente de esta ciudad, Alberto “Coleco” Krysvzuk, volvió a sorprender ayer con nuevas y polémicas declaraciones al afirmar que detectó que le falsificaron su firma en numerosos documentos administrativos de la Municipalidad, como liquidación de sueldos, cheques, resoluciones y decretos.El viernes, cuando habló por primera vez luego de ser apartado del cargo por el Concejo Deliberante, acusó al vice intendente, Carlos “Jair” Pereira, y al resto de su gabinete de armar un “boicot” en contra para perjudicarlo.Entrevistado por diversos medios, “Coleco”, como lo conocen popularmente, se defendió diciendo que todo es parte de una interna política entre él y otros grupos políticos interesados en llegar al poder, que utilizaron estas acusaciones “armadas” para desplazarlo del cargo debido a que nunca pudieron superarlo en elecciones.Dijo que presentó la rendición de cuentas del primer trimestre de este año y que durante los años anteriores había informado a los ediles, como está obligado a hacerlo por indicación de la Carta Orgánica. Aunque reconoció que algunas veces la información que brindó (acerca de la contabilidad de la Municipalidad, del parque vial, del patrimonio y de los gastos) había sido en forma verbal.Agregó que está “a disposición de la Comisión Investigadora para que todo esto se aclare” y que acompañará con documentación para determinar quienes fueron los que le falsificaron las firmas, a quienes anticipó que denunciará penalmente.En varias ocasiones evitó responder sobre las acusaciones por desmanejos, irregularidades en la administración de los dineros públicos y dijo que “estoy a disposición y mi casa está siempre con las puertas abiertas; yo siempre estoy del lado del pueblo”.El Concejo Deliberante lo suspendió por 45 días, la semana pasada, con el voto de cinco de los siete concejales (cuatro renovadores) y comenzaron ayer las deliberaciones para investigar la gestión del intendente, que al parecer habría cometido serias irregularidades.En 45 días “Coleco” deberá presentar una defensa o descargo y luego, si los concejales creen que hay pruebas suficientes de incumplimiento de sus deberes de funcionario público, podrían destituirlo definitivamente del cargo.Las palabras de Krysvzuk se contradicen con las afirmaciones que realizó la semana pasada la vocal del Tribunal de Cuentas de la provincia, Silvia Machado de Comparín, quien aseguró que en los últimos años se detectaron varias irregularidades (falta de documentación y no presentación de balance o rendición de cuentas) en la gestión del intendente suspendido. Asumió “Jair” PereiraPor su parte, el vice intendente electo en 2011, Carlos “Jair” Pereira, cambió la cerradura de la Municipalidad y asumió ayer el cargo de intendente en reemplazo de Krysvzuk. Negó cualquier posibilidad de complot político para descabezar al intendente y aseguró que “cada uno tiene que hacerse cargo de lo que hizo y lo que no hizo, cada uno tiene que asumir la responsabilidad que le toca”. Afirmó que recibió “graves amenazas” que no sabe con certeza de dónde provienen pero tiene sospechas.Además, indicó Pereira que “Coleco es intendente hace diez años, entonces me parece raro que se dio cuenta recién ahora que le falsificaron las firmas y que no presentó la información al Concejo Deliberante porque su propia gente le escondía los pedidos de información que le enviaban los concejales”.El suspendido intendente Krysvzuk además había pedido que también se suspenda a Pereira, por ser parte de la misma gestión y compartir responsabilidades. Sin embargo, “Jair” respondió que “voy a respetar la decisión tomada por los concejales y respetar la Carta Orgánica, voy a estar a cargo del municipio durante 45 días”.Luego desmintió la existencia de una pelea o interna con el intendente suspendido y señaló: “En ningún momento hemos discutido y yo no traiciono a nadie, soy un tipo de conducta y tengo transparencia. Cuando vas a cuidar las cosas públicas, tenés que ser transparente, porque las cosas son del pueblo”.





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