OBERÁ. (Sergio Alvez, enviado especial). El Jurado del Certamen Regional NEA de la X Edición del Festival Internacional de Cortometrajes Oberá en Cortos, compuesto por Luiz Cassol, Camilo Gómez Montero y Adrián Ogando, luego de haber visionado las diez obras en competencia, confirió por unanimidad, el primer premio de dicho certamen a la película “Historia del niño que ríe”, de las directoras Ana Godoy y Ana Ynsaurralde, de Chaco. En su fundamentación, el jurado entendió que “lleva este galardón por lograr, con registros caseros e íntimos y el uso de recursos acertadísimos, no caer en el golpe bajo en una situación tan difícil y relatar de manera optimista una historia conmovedora que cautiva al espectador de comienzo a fin”. El mismo jurado confirió tres menciones especiales. Una de ellas para la obra “La Rosa Azul”, por el buen uso de las técnicas de stop – motion y pixilation de compleja y dificultosa técnica para redondear una obra entretenida y humorística; otra para la obra “Caperucita Roja y El Leñador en el Monte”, por su buena propuesta estética y su cuidada cinematografía. Y otra para “Casa es Casa”, por lograr, con un recurso tan simple como las entrevistas, un corto entretenido y cálido, con toques humorísticos.Ganadores del certamenInternacionalEn el certamen internacional, el jurado compuesto por Julio Raffo, Jorge González y Rodrigo Díaz, otorgó el primer premio al film “Oda”, de la directora bonaerense Charo Venegas, “por la fuerza de su narración, por haber asumido exitosamente un desafío estético que integra la danza con la actuación y por la delicadez con la cual abordó un episodio reciente, dramático, que conmovió a la sociedad argentina”, según refirió el jurado. En este segmento internacional hubo una mención especial del cineasta paraguayo Hugo Jiménez, “por sus cualidades estéticas y narrativas”.Anoche, el acto central incluyó proyecciones de los cortos producidos durante el Festival; además de la entrega de certificados de reconocimientos a todos los que participaron durante estos diez años. Estuvieron presentes las organizaciones que hicieron posible esta fiesta de cortometrajes, la directora de Cultura de la Municipalidad de Oberá, Marta Wieremiey; el vicedecano de la Facultad de Artes, Daniel Mielniczuk, los realizadores del NEA; de Paraguay y de Brasil, estudiantes de la Universidad Latinoamericana (UNILA); los talleristas y los integrantes de la productora Wayruro, del proyecto Kallpa TV de Jujuy, entre otros.“Oda es en honor a las víctimas de Once y le dedicamos el premio”Conmovida hasta las lágrimas, la directora de “Oda”, Charo Venegas Calderón, junto al director de fotografía, Agustín Boero, destacaron que no se esperaban semejante premio. “Competimos junto a tantos trabajos tan buenos que no pensamos que eligieran el nuestro. Estamos felices!”, exclamó la realizadora. “Es mi primer trabajo, lo hicimos junto a un equipo de amigos formidables. Dedicamos este premio a todas las víctimas de esa masacre y a los que diariamente arriesgan sus vidas en la odisea de viajar en los trenes que circulan por la ciudad de Buenos Aires”, dijo muy emocionada.“Oda es un cortometraje que refleja la masacre del tren de Once”, explicó la joven realizadora oriunda de San Juan. “Lo hicimos en honor a ésas víctimas y utilizamos el género video danza. Mostramos el recorrido de un personaje al que ubicamos en el tren, luego en la plataforma y en distintos estados emocionales se ve lo que pasa ese personaje que mira a la tragedia cara a cara”, destacó la realizadora.Afirmó que eligió ese tema para su obra porque la masacre en sí misma “fue algo que a todos los que hicimos Oda nos tocó de cerca porque vivimos en Buenos Aires. Todos teníamos un amigo un conocido que si no había muerto en Once, había quedado herido. Ésa sería la preocupación por el hecho en sí mismo, y después la preocupación de poder aportar desde el arte, militar desde el arte, es algo que tratamos de plasmar realizando el cortometraje y a la vez la búsqueda detrás del género es una recorrida que vengo haciendo con una realizadora misionera de Posadas que tiene que ver con estudiar un poco el lenguaje del cuerpo y el lenguaje de la cámara y como pueden operar entre si, como puede funcionar eso para contar algo", describió la directora.El responsable de fotografía de la obra, Agustín Boero, trabajó con un compañero y Oda es el tercer video danza que realizan juntos en cuanto a la estética fotográfica. "Este proyecto nos llevó un tiempo vertiginoso, rápido, pero vino bien porque muchas veces los proyectos quedan como estancados en largos procesos de post-producción y a Oda pudimos verlo enseguida luego de haberlo terminado. En la fotografía, tratamos de generar distintos climas a lo largo de lo que éste personaje tenía que afrontar lo que le estaba pasando. Es lo que más o menos intentamos reproducir, y después darle una cierta verosimilitud con el vagón en el que las victimas se trasladaban, teniendo en cuenta que en verdad es un vagón que está quieto y abandonado, que nadie lo está usando. Intentamos reproducir de la mejor manera posible ese viaje en todo lo que significa a través de la fotografía", dijo Boero. “Estuvo bueno militar nuestra obra en el Oberá en Cortos”Tanto Charo Venegas Calderón como Aguistín Boero coincidieron en la importancia de que se difunda el material. “El cortometraje no es un formato masivo en sí mismo, entonces viendo las posibilidades de difusión, el Festival Oberá en Cortos es el ámbito en el que nos proponemos difundir a pleno. Los festivales son espacios muy importantes para nuestra obra. Uno se traslada a un lugar y entra en contacto con personas que tienen otra idiosincrasia, otra cultura. Por ejemplo, para nosotros una pregunta importante es ¿cómo se tomará esta obra sobre la masacre otra gente que no vive en una ciudad con el tren como transporte cotidiano?, por eso está buenísimo saberlo, y uno lo sabe viniendo a festivales como el Oberá en Cortos en Misiones. Si yo no vengo, esa experiencia no toma lugar. Es ideal poder acompañar la obra en el sentido que a la gente se le generan dudas y pueda preguntar. Además está el plus de conocer a otros realizadores, la calidad de los trabajos que hay, y si no veníamos tampoco nos íbamos a enterar cuáles eran esos trabajos. Hay toda una parte que nos íbamos a perder si
no veníamos al Festival Oberá en Cortos. Hay que venir a participar, a hacerle el aguante a tu obra, a seguir militándola”, subrayó Venegas Calderón.
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