POSADAS. La capacidad de sobreponerse a determinadas circunstancias, aún en la adversidad del resultado, es un punto muy importante a favor de un equipo con pretensiones. Este aspecto es aplicable al momento que vive Rosamonte tras el triunfo sobre Jorge Gibson Brown por el Argentino B, y las perspectivas hacia futuro que se le presenta a los posadeños. El duelo entre estos elencos misioneros tuvo todos los condimentos de un clásico, que no tiene la historia de otros detrás, pero que representa en el trasfondo de los choques entre apostoleños y posadeños, un duelo entre interior y capital, o si se quiere el enfrentamiento del poderoso con el humilde, ya que la opulencia de un club con el respaldo de una empresa yerbatera detrás frente a un club de barrio, que con algo de apoyo del estado detrás, encierra esta cuestión por más que sus protagonistas traten de disimularlo. No obstante, esta situación ambos están haciendo un muy buen papel en un torneo muy duro y muy parejo, por lo acotado de la diferencia entre los elencos que pelean por la clasificación y que obliga a jugar cada partido como una verdadera final.Si bien desde el punto de vista del resultado el más favorecido con el mismo fue Yerbatero, pues necesitaba sumar de a tres frente a un rival directo por la clasificación, tanto uno como siguen con las chances intactas, ya que esa posibilidad depende directamente de si mismos y no de otros resultados.Ahora bien si uno analiza desde el punto de vista de los papeles. Es decir ¿qué rivales tiene cada uno en el camino?, el elenco posadeño pareciera tiene algo más alivianada la carga (Deportivo, San Martín –rival directo-, Sarmiento –clasificado- y Las Heras –descendido-), ya que los apostoleños de los cuatro cotejos que le restan, tres son frente a rivales directos en la carrera por la clasificación (Textil, Fontana y For Ever) y cierra en Concordia con Colegiales.Recién el lunesBrown y Rosamonte, los dos representantes misioneros en el torneo Argentino B, jugarán frente a Deportivo Mandiyú y Textil Mandiyú, recién el próximo lunes.Los posadeños se medirán con el Deportivo Mandiyú, en cancha de Huracán de Corrientes, desde las 16.30. Los correntinos están en zona de descenso, por lo que el partido ante el Verdirrojo, es de vital para su intención de permanecer en la categoría. El árbitro de este choque será Sebastián Ibáñez de la Liga de Quitilipi (Chaco).Mientras que los apostoleños se medirán con Textil, desde las 20, en el estadio General Belgrano con arbitraje de Cristian Cañete de Roque Saenz Peña (Chaco). esta será otra final para los dirigidos por Korol.




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