BEIJING, China (Medios Digitales). “Los cerdos muertos se pudren y apestan luego de un tiempo flotando en el agua. Cuando navegamos por el río el olor es terrible, realmente terrible, nos está afectando seriamente a la respiración”. Así describe uno de los afectados la última catástrofe ambiental china. Esta vez no es la polución del aire ni un vertido de metales pesados, sino 5.916 cerdos muertos (según el último recuento) flotando en las aguas del río Huang Pu, que cruza Shanghai y abastece de agua potable a millones de personas.Las autoridades están tratando de desactivar el alarma social que ha generado este macabro descubrimiento. La comisión agrícola de Shanghai aseguró que una de las muestras de agua tomadas contenía circo virus porcino, un agente muy infeccioso entre estos animales pero que no afecta ni se contagia entre humanos.“En el caso de que haya contaminación, podemos adoptar distintas medidas. Añadir más desinfectante en el agua o incrementar la cantidad de carbón activado para purificar el agua”, indicó Qian Huizhou, subdirector de Tratamiento de Aguas de Xiaokunshan.
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