Posadas. El único objetivo de los vecinos es “salvar” el Jardín Botánico del estado de abandono en el que se encuentra, con las instalaciones cada vez más deterioradas y la falta adecuada de “conservación” de las especies, plantas, árboles y pájaros que allí se destacaban. Sin embargo, todavía esperan una respuesta de las autoridades a la última nota presentada en octubre, cuando solicitaron el adecuado tratamiento de una “canaleta” que queda entre el predio del Jardín Botánico y la costanera, ya que allí se acumula agua que no tiene salida, además de todo tipo de residuos que contribuyen a la proliferación de insectos. Además de la recuperación de la biblioteca, así como el mejoramiento de los sanitarios, que consideran una “falta de respeto” a los visitantes, pues a la falta de higiene se suma el deterioro de las instalaciones y las pérdidas de agua por todos lados. En los mejores años los niños inundaban todo con sus risas mientras se divertían en la calesita, de la que hoy solo queda el “esqueleto”. Así como también del sector de la hamburguesería, dónde unicamente las paredes resisten el paso del tiempo.“Nosotros queremos que se ocupen y recuperen esto que es patrimonio histórico, no queremos una transformación del jardín en un parque, queremos que alguien entendido en el tema se ocupe de dirigir para conservar de manera adecuada este pulmón verde de la ciudad”, manifestó Ramona Acosta, quien cuenta con el apoyo de sus vecinos.“Es una vergüenza, dicen que delegaciones escolares visitan el lugar, y es cierto, llegan colectivos llenos de estudiantes, pero es un desastre lo que muestran, no se puede mostrar esto cuando se señala como a la ciudad como turística”, agregó. Acosta, quien durante muchos años fue integrante de la Asociación Jardín Botánico, pidió una urgente intervención para “salvar” el lugar y la biblioteca que por muchos años fue el centro de atracción, de estudio e investigaciones.
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