La investigación por el homicidio de Denis Damián Iglesias (21), ocurrido en la noche del jueves en inmediaciones del barrio Belén, en Garupá, dio un giro inesperado en las últimas horas. Según informaron fuentes judiciales, la pericia clave realizada sobre el único detenido en la causa, Lucas F. (26), arrojó un resultado negativo.
Los especialistas de la Policía Científica llevaron a cabo el examen para detectar residuos de pólvora y otros componentes químicos en las manos del sospechoso. El análisis técnico-científico determinó la ausencia de rastros de deflagración, lo que descarta que el joven haya manipulado o accionado un arma de fuego en las horas previas a su captura.
El detenido había sido señalado en declaraciones testimoniales como el presunto autor del ataque que acabó con la vida de Iglesias de siete balazos. Sin embargo, la contundencia de la pericia técnica pone en duda su autoría material y obliga a los investigadores a replantear la hipótesis del caso.
A pesar de este resultado, el joven continúa a disposición del Juzgado de Instrucción 3, bajo la supervisión del Dr. Fernando Verón, mientras se evalúa si tuvo otro tipo de participación en el hecho o si los testimonios que lo incriminaron fueron erróneos.
Con la autoría material en duda, la Dirección Homicidios de la Policía de Misiones ha intensificado los rastrillajes y las tareas de inteligencia para hallar el arma homicida y establecer si existe un segundo sospechoso que haya sido el verdadero tirador. La causa permanece bajo estricto secreto de sumario mientras se recolectan nuevas pruebas.





