Cada septiembre, miles de hombres en América Latina y otras regiones aceptan un desafío particular: evitar la masturbación durante 30 días. Esta práctica anual, que se conoce como “Septiembre sin Fap”, toma su nombre de la palabra inglesa “fap”, utilizada en internet para referirse a la autosatisfacción masculina.
El origen del reto se remonta a 2006, cuando comenzó a circular en foros de internet como 4chan. Posteriormente, la iniciativa se difundió a otras comunidades digitales, como Reddit, y ganó fuerza en grupos de habla hispana como “La Grasa” y “La Legión Haash”, consolidándose como tendencia cultural en redes sociales desde 2014.
Un estudio de la Universidad de Zhejiang, realizado en 2003, alimentó la popularidad del reto. En esa investigación, se analizaron a 28 voluntarios, y se encontró que tras siete días de abstinencia, los niveles de testosterona aumentaban un 145.7% en comparación con la línea base, lo que generó interés sobre los posibles efectos fisiológicos del desafío.
Aunque el reto limita la masturbación, no prohíbe las relaciones sexuales. Para muchos participantes, “Septiembre sin Fap” es una forma de ejercitar la disciplina y el autocontrol, mientras que otros lo abordan con humor y memes, bautizando como “soldados caídos” a quienes abandonan antes de cumplir el mes.
El ambiente que rodea el desafío mezcla una búsqueda de autocontrol con un toque de humor y cultura digital. Las bromas, memes y expresiones populares circulan cada septiembre, dando un carácter lúdico a la experiencia colectiva, que no está exenta de crítica y discusión.
Actualmente, “Septiembre sin Fap” es más que un simple reto viral: representa para algunos un camino hacia sentirse más productivos o plenos, y para otros, una tendencia cultural en auge que cada año gana más seguidores y presencia en las redes sociales latinoamericanas.
Fuente: Diario Perfil









