La Cámara de Diputados convalidó este miércoles el veto del presidente Javier Milei a la ley que establecía un incremento del 7,2% en las jubilaciones y pensiones, además de la suba del bono de $70.000 a $110.000. Como el rechazo de un veto requiere la aprobación de ambas Cámaras, la decisión del Poder Ejecutivo quedará firme.
La oposición reunió 160 votos para insistir con la norma, frente a 83 rechazos del oficialismo y aliados. Sin embargo, las seis abstenciones resultaron determinantes, ya que elevaron el umbral necesario para alcanzar los dos tercios de los presentes.

El resultado significó una victoria para el oficialismo libertario después de haber sufrido una derrota en el inicio de la sesión, cuando la Cámara logró rechazar el veto a la ley de emergencia en discapacidad por 172 votos contra 72.
Durante la jornada, el presidente de la Cámara, Martín Menem, había puesto a votación la habilitación del debate sobre el aumento de jubilaciones. En ese momento, la oposición consiguió 159 votos afirmativos, cifra suficiente para los dos tercios debido a las numerosas ausencias, entre ellas cinco diputados de La Libertad Avanza y cuatro del PRO.
En el recinto no faltaron las acusaciones. Pablo Juliano (Democracia para Siempre) reclamó coherencia a quienes votaron habilitar el debate y luego se abstuvieron. En tanto, Germán Martínez, jefe de Unión por la Patria, criticó a quienes, según dijo, “están mirando para otro lado”. Más duro fue el radical disidente Fernando Carbajal, quien denunció que “algunos gobernadores están presionando a sus diputados” y advirtió: “No sean crápulas. Es una forma de corrupción cambiar ATN por jubilados”.
La Oficina de Presupuesto del Congreso estimó que la medida vetada hubiera tenido un impacto de entre el 0,22% y el 0,42% del PBI. En números concretos, con el esquema vigente, la jubilación mínima en agosto fue de $314.305, más un bono de $70.000, totalizando $384.305. En cambio, de haberse aplicado la ley sancionada, el haber mínimo habría ascendido a $336.928, y con el bono de $110.000 alcanzaría los $446.928.
La jubilación máxima, en tanto, se ubicó en $2.114.977, mientras que con la norma anulada hubiera trepado a unos $2.267.263.
Finalmente, la moción del radical Rodrigo de Loredo de votar por artículos para insistir de manera parcial fue descartada, y la votación se resolvió de manera conjunta, sellando la convalidación del veto presidencial.







