
En una previa caliente, con incidentes y casi con suspensión del partido, Guaraní Antonio Franco y Atlético Huracán se enfrentaron por el choque de vuelta de la final del torneo Apertura de la Liga Posadeña de Fútbol y la alegría se quedó en Villa Sarita. La Franja y el Globo empataron 1 a 1, pero por la diferencia en la ida (el elenco de Manuel Dutto y Juan Eluchans se impuso 2-0), el título es franjeado.
El encuentro de este domingo agradable en el estadio Clemente Argentino Fernández de Oliveira convocó a mucho público de ambas parcialidades, y los protagonistas no decepcionaron. Se vio un buen partido, pero recién tuvo acciones en la segunda parte.
Mauricio Vergara puso arriba al Globito a los 11 minutos del complemento tras un error del arquero franjeado. Parecía que Huracán se metía en partido y se acercaba al empate global, pero careció de oportunidades claras ante un equipo bien plantado.
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Sobre el final, ante un equipo ya desordenado y desesperado por el gol, a los 47 minutos apareció solo en el área chica Mauro Gómez y de cabeza anotó la igualdad. El combinado de Claudio Benítez sintió el golpe y no se pudo reponer. Guaraní tuvo para liquidar y perdonó.
Pitazo final y delirio franjeado en Villa Sarita. El título de Liga quedó en manos del más regular, Guaraní, que volvió a ser campeón del certamen doméstico para seguir siendo el más ganador de la historia. De yapa, consiguió el primer objetivo: se clasificó al torneo Regional Amateur 2025/26. Ahora va por todo, y quiere el título provincial de la Federación Misionera.
La historia de siempre, lamentable
A minutos de que se inicie el partido de este domingo por la tarde, hubo incidencias que pudieron ser graves y amenazaron el normal desarrollo del espectáculo deportivo. En las afueras del estadio, facciones de ambas hinchadas se cruzaron a piedrazos y botellazos.
Lo más grave se dio cuando un grupo de simpatizantes locales logró ingresar al sector de los hinchas de Huracán buscando agredir, sin importar que en el lugar había mujeres, niños, gente mayor y personas con discapacidad. Hubo algunas personas con lesiones leves.

En ese marco, desde Huracán apuntaron a la mala cobertura de seguridad policial, que dejaron la zona “liberada” para que la barra franjeada llegue al sector de la parcialidad visitante y provoque disturbios.
El partido estuvo demorado una hora y diez minutos, cuando entre los presidentes de los clubes, el presidente de la LPF, el árbitro y el jefe del operativo policial se reunieron y decidieron finalmente que el partido se juegue.
La pica entre estas hinchadas viene desde hace bastante tiempo, donde los denominados “barras” buscan mostrarse como los más “guapos”, mostrar poder, robando banderas, algún instrumento a la hinchada contraria o atacándolos, como en este caso. Años atrás, en el mismo escenario, hubo choques entre ambas parcialidades en las afueras de estadio, tal y como ocurrió hoy. La historia de siempre, lamentable.










