Con el correr de las fechas, Crucero del Norte fue agotando sus chances y hoy en día su plaza en el Torneo A está muy complicada. Necesita triunfos urgentes y el encuentro de hoy frente a Gimnasia de Concepción del Uruguay de Entre Ríos puede ser determinante para su futuro en la tercera divisional del fútbol argentino. El encuentro entre misioneros y entrerrianos se desarrollará hoy, a partir de las 15.30 hrs, en el estadio Andrés Guacurarí. Para este choque, el Consejo Federal designó al correntino Leonardo Billanueva para impartir justicia.
De cara a encuentro, los misioneros llegan con la moral golpeada por la sucesión de malos resultados y la frustración de no cambiar su rumbo. Con la derrota 2-0 de la semana pasada ante Sportivo Las Parejas, el elenco de Adrián Álvarez llegó a una triste cifra de 14 partidos consecutivos sin victorias.
En resumen, la campaña del Colectivero tuvo más malas que buenas. De 21 partidos disputados, perdió en 12 ocasiones, empató 5 y apenas ganó en dos oportunidades. Para encontrar la última alegría de Crucero, hay que retroceder hasta el 12 de abril, cuando superó por 1-0 a Juventud Antoniana, por la quinta fecha de la fase regular.
Sin embargo, hay un dato más grave aún y es que hace tiempo perdió una de sus principales virtudes: su fortaleza de local. Y es que allí no gana hace seis encuentros, de los cuales rescató apenas un empate y sufrió cinco derrotas. Adelante, Crucero tendrá al Lobo, que atraviesa una situación parecida y también está complicado, aunque estos tienen un mejor panorama por delante y saben que dependen de sí mismos para salvarse.
Sin embargo, también llegan golpeados tras un inicio poco alentador en la Reválida, donde apenas sumaron una unidad y vienen de perder de local con Sarmiento de Resistencia por 1-0.
A Crucero ya le tocó antes pelear para defender su plaza y lo logró efectivamente en ocasiones anteriores. Pero esta vez la situación es diferente, pues no depende de lograr un único triunfo, sino que depende de varios y además esperar resultados a favor. Matemáticamente tiene chances, pero tiene que hacer su parte y desde hoy mismo.








