En medio de un contexto económico complejo y de alta incertidumbre, las cooperativas de servicios públicos en Misiones atraviesan el escenario nacional sin quedar al margen de las dificultades, pero con estrategias propias para sostener su funcionamiento. Así lo expresó María Victoria Vercelli, presidenta de la Cooperativa Luz y Fuerza Ltda. del departamento misionero de Libertador General San Martín, que está ubicada en la localidad de Puerto Rico, quien remarcó que la solidez institucional, el vínculo con los asociados y la responsabilidad en la gestión permitieron hacer frente a los desafíos actuales.
Lejos de minimizar las dificultades, Vercelli aseguró que “las cooperativas no están ajenas a la crisis nacional“. La situación económica, marcada por la inflación, la caída de la actividad y el incremento de los costos operativos, impacta de lleno en las entidades del interior. “Venimos de atrasos tarifarios, de retrasos en algunas obras importantes”, recordó.
Uno de los pilares fundamentales, según Vercelli, es la cercanía con los socios. “Una de las fortalezas es la atención con los asociados. A partir de algo tan básico como atender el teléfono o buscar darles respuesta, tratamos de llevarles una solución”, señaló en diálogo con FM de las Misiones. Aclaró además que las cooperativas no son formadoras de precios, sino que reciben la energía, la transforman y la distribuyen en sus respectivas áreas de concesión. “Nosotros no establecemos el valor agregado de distribución. Lo que hacemos es mejorar el servicio, hacer las obras necesarias y llegar a todos los rincones”, afirmó.
La cooperativa que preside cubre un área de concesión que abarca cinco municipios y parte de un sexto, lo que la convierte en una de las más extensas en infraestructura y diversidad territorial. “Nuestra cooperativa abarca áreas urbanas, suburbanas y rurales”, explicó. Esa diversidad implica desafíos técnicos y logísticos mayores, desde el mantenimiento de más de 19.000 kilómetros de cables hasta el reemplazo de postes de madera por columnas de hormigón más resistentes a las condiciones climáticas misioneras.
Uno de los puntos que más destaca Vercelli es el compromiso con los socios. Resaltó que la atención personalizada y la voluntad de ofrecer soluciones concretas son pilares fundamentales para sostener la relación con la comunidad. “A partir de la posibilidad que tenemos de algo tan básico, pero tan fundamental como atender el teléfono, como buscar darle respuesta a nuestros asociados, tratamos de llevarles una solución”, afirmó.
Sobre el sistema tarifario, aclaró que las cooperativas no tienen capacidad para fijar precios. Son receptoras del servicio mayorista y lo distribuyen, sin intervenir en la determinación del valor agregado de distribución. “Nosotros lo que hacemos es recibir la energía de Misiones y ya transformarla para poder llevarla a todos los asociados”, explicó, al tiempo que subrayó que, dentro de esas limitaciones, se esfuerzan por mejorar permanentemente la calidad del servicio.
Consultada sobre la planta de trabajadores y los ajustes frente a la crisis, Vercelli descartó que haya habido despidos. Valoró al equipo humano como una de las principales fortalezas de la institución y reconoció que muchas veces trabajan con menos personal del que sería necesario. “No se dio la necesidad de despedir gente”, aseguró. Sí hubo reprogramación de obras y postergaciones de inversiones, pero se respetaron las paritarias y los derechos laborales. “Tratamos de cumplir con el personal de la cooperativa porque entendemos que esa es una de las fortalezas”, enfatizó.
Uno de los temores más extendidos entre las cooperativas es el aumento de la morosidad. Sin embargo, en el caso de Puerto Rico la situación está relativamente controlada. Vercelli explicó que cuentan con mecanismos de contención: recién con el vencimiento de la tercera factura se corta el servicio, lo que otorga un margen para que los socios se acerquen y busquen alternativas. “La gente sigue cumpliendo con sus obligaciones”, remarcó, y valoró la conciencia general sobre la necesidad de sostener el sistema solidario.
De cara al futuro, no ocultó su preocupación por los constantes aumentos anunciados desde el Gobierno nacional, y sus efectos en la cadena productiva y en los hogares. “El costo de la energía no era significativo ni en la producción ni en los hogares. Sabemos que eso cambió”, dijo. Frente a ese panorama, insistió en que la prioridad es ser cautelosos con las inversiones, pero sin dejar de avanzar en las obras imprescindibles. Mencionó entre ellas el desmalezamiento, el recambio de postes y la planificación de una estación transformadora en conjunto con Energía de Misiones, que permitiría mejorar la capacidad de respuesta en el verano.
En ese sentido, puso en valor la articulación con los municipios del área de concesión, especialmente para atender las necesidades energéticas de los parques industriales locales. El objetivo, dijo, es contribuir al desarrollo y a la generación de empleo.
La mirada a largo plazo incluye también los desafíos de la transición energética y la adaptación tecnológica. Vercelli expresó confianza en la capacidad del movimiento cooperativo para atravesar esta etapa. “Estoy convencida de que estamos todos dispuestos a poder pasar esta transición de la mejor manera”, sostuvo. En el caso de su cooperativa, resaltó los avances logrados en conectividad a través del servicio de fibra óptica, que permitió llegar con internet y cable a zonas impensadas hasta hace pocos años.






