El Gobierno de Javier Milei dio un paso importante en su relación con China al autorizar, a partir de este lunes, el ingreso de ciudadanos chinos sin necesidad de tramitar visa argentina. La medida, establecida en la Resolución 316/2025 y publicada en el Boletín Oficial, solamente exige que los visitantes posean una visa válida y vigente de Estados Unidos o de la Unión Europea en sus pasaportes ordinarios. La autorización aplica tanto para turistas como para hombres de negocios, con un plazo máximo de permanencia de 30 días para los ciudadanos chinos.
Esta flexibilización no solo beneficia a los viajeros chinos, sino que también alcanza a ciudadanos de la República Dominicana, aunque bajo condiciones más restrictivas. Para estos últimos, la exención de visa se limita a ingresos en carácter transitorio y exclusivamente con fines turísticos, con un límite de estadía de 90 días. Además, para ambos grupos aplican restricciones, ya que no podrán solicitar un cambio de categoría migratoria dentro del país, aunque sí podrán prorrogar una vez su estadía previa evaluación de la Dirección Nacional de Migraciones.
La medida responde a una demanda histórica de China para reactivar sus vínculos comerciales y turísticos con Argentina. Su implementación se enmarca en una serie de gestos políticos de la administración Milei hacia el gobierno de Xi Jinping, a pesar de las presiones previas del gobierno de Donald Trump para que Argentina se distanciara del país asiático. Esta decisión representa un giro significativo en la política exterior del actual Gobierno, que en años anteriores mostraba una postura más reticente hacia China.
Por otro lado, la Resolución 316/2025 se enuncia también como un acto de reciprocidad diplomática. Desde el 1 de junio de 2025, China implementó una exención experimental de visa para ciudadanos de varios países sudamericanos, entre ellos Argentina, Brasil, Chile, Perú y Uruguay, hasta mayo de 2026. En paralelo, República Dominicana ya había eximido del requisito de visa para turistas argentinos, razón por la que Argentina adoptó un criterio similar para turistas dominicanos. Así, la medida busca equilibrar los flujos migratorios entre las partes.
El fundamento legal que respalda esta eximición radica en la confianza otorgada a los mecanismos migratorios de control de Estados Unidos, país cuya rigurosidad en la emisión de visas argentinas considera suficiente para validar y confiar en las verificaciones consulares previas, evitando así duplicar procesos. Este planteo se expone explícitamente en el texto oficial, que entiende cumplidos los requisitos migratorios argentinos cuando el visitante cuente con la visa estadounidense.
Fuente: Diario Perfil









