El incremento de los delitos contra la propiedad y sus vinculaciones directas con el narcomenudeo encendieron alertas en la ciudad posadeña y Garupá, especialmente, por el despliegue de las pequeñas organizaciones delictivas que afectaron a la mayoría de los barrios, de manera central en asentamientos pero también con la utilización de viviendas como en Itaembé Guazú.
Los números para contextualizar: durante junio, el juez de Instrucción 2 de la Primera Circunscripción Judicial, Juan Manuel Monte, imputó a 150 personas, 90 de ellas detenidas en los operativos conjuntos que alcanzaron a chacras de la zona oeste y sur de la capital posadeña y varios sectores de la vecina Garupá.
De las fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, las acciones contra las bandas o gavillas dejaron en evidencia que no son precarias en cuanto a disponer de recursos para sostenerse en el tiempo y multiplicar sus ganancias. Uno de los ejemplos fue la instalación de una red de cámaras de seguridad montadas en postes y árboles de la chacra 145 en Villa Cabello y que servía como sistema de seguridad para que los cabecillas alertaran de inmediato la proximidad de las patrullas policiales y tomar los recaudos pertinentes.

En este caso, el denominado “Operativo blindaje” que encabezó el juez Monte el jueves 12 de junio, permitió la aprehensión de 26 sospechosos de los 150 mencionados, pero se necesitaron 250 efectivos de la fuerza de seguridad para que los 20 allanamientos dieran resultado positivo. Estas acciones fueron monitoreadas por aire con drones que colaboraron en el mapeo de los búnkeres y guaridas de reducidores y dealers.
Como lo adelantó este Diario, durante junio se realizaron procedimientos por delitos contra la propiedad que dejaron como saldo: 9 detenidos en 50 allanamientos.
Apuntaron a seis organizaciones criminales que operaban en distintos puntos de los distritos señalados. Se lograron secuestrar armas de fuego, estupefacientes, dinero en efectivo, motocicletas robadas y más de un centenar de bienes relacionados con causas judiciales activas.
Los operativos se destacaron en las chacras 145, 181, 189 y 190. Además de los barrios como San Isidro, Yohasá, A4, San Lucas, Esperanza, Faraón y San Onofre. Extendiéndose también a puntos de Garupá donde se desbarataron redes vinculadas al narcomenudeo y robo de motocicletas.

En el barrio Yohasá, se allanaron tres búnkeres de acopio de droga y bienes robados: fueron detenidos nueve dealers y se recuperaron 300 objetos robados.
En la chacra 181, diez personas fueron aprehendidas en siete operativos por abuso de armas y amenazas calificadas.
En la 189 y 190 con once allanamientos fueron detenidas quince personas y se secuestraron cinco motos, armas de fuego y más de cuatro millones de pesos.
Entre los investigados atrapados se encuentran líderes barriales y cabecillas de bandas dedicadas a delitos complejos, como el robo agravado, tráfico de estupefacientes, portación ilegal de armas y reducción de bienes sustraídos.
Se destacaron las detenciones de “Koala”, joven conocido por robos de motocicletas y la de “El Patrón” por delitos modalidad “escruches” a viviendas y comercialización de estupefacientes.









