El paso fronterizo internacional Tancredo Neves, que une Puerto Iguazú y Foz de Iguazú (Brasil), es el cruce terrestre con más tránsito de personas del país, duplicando el tránsito del aeropuerto de Ezeiza en algunos períodos. Sin embargo, en la actualidad, solo tiene una persona para cumplir las tareas de inspección de sanidad.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, el coordinador regional de Sanidad de Frontera, Walter Villalba, confirmó esta situación y admitió que en esa área “lo poco que todavía funciona, lo hace a media máquina y cada vez con más restricciones”.
“En Iguazú teníamos cuatro inspectores y ahora solo queda uno porque echaron a dos y uno se jubiló, pese a que es el paso terrestre más importante del país donde entran y salen un millón de personas por mes. Además, hay que controlar vuelos internacionales privados pues los vuelos de línea nacionales no se controlan. La tarea que tiene esa persona es casi imposible de llevar adelante, por eso colaboraba con nosotros la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) que acaba de ser disuelta esta semana”, lamentó.
Centros de sanidad cerrados
Los dos centros de sanidad de frontera construidos e inaugurados por el Ministerio de Salud de la Nación durante 2020 permanecen cerrados desde 2021.
Según explicó Villalba, el centro de salud de frontera de Posadas está en manos de la Gendarmería Nacional “porque estamos con algunos inconvenientes administrativos y nadie se hace cargo, por lo que Gendarmería lo está utilizando para el descanso de algunos de sus activos y también para el cuidado”. Lo mismo ocurre con el centro del paso fronterizo de Puerto Iguazú, solo que éste además fue vandalizado, violentado y le robaron un montón de cosas.
El problema administrativo que mencionó se debe a que la propiedad de estos centros quedó en una suerte de limbo. Es que en 2021 el Ministerio de Salud de la Nación hizo una transferencia temporal de las instalaciones al Ministerio de Salud Pública de Misiones pero quedó pendiente la transferencia administrativa y patrimonial a la provincia. Para ello, se dio solo el primer paso: en noviembre de 2023, Obras Públicas de la Nación transfirió el patrimonio de estos centros y del hospital modular al Ministerio de Salud de la Nación pero solo se culminó la transferencia patrimonial a la provincia de Misiones del hospital modular de Puerto Iguazú, mientras que los dos centros de sanidad de frontera figuran aún como patrimonio de Nación.
“Solo dos centros están en funcionamiento”
Según indicó Villalba, “el único centro de salud de frontera que se está utilizando de forma real es el de Concordia (Entre Ríos) que ni bien asumió el nuevo gobernador Rogelio Frigerio se hizo cargo y puso personal provincial porque ellos tienen un área de manejo de emergencias epidemiológicas y climáticas, este centro colabora con sanidad de frontera y además funciona con otras tareas”.
El otro centro de sanidad activo es el de Santo Tomé, “ese centro está en un ámbito privatizado porque está tercerizado por el Gobierno nacional desde hace mucho tiempo. Se designaron dos personas que vinieron hace un año, pero con muy pocas funciones”, detalló.
El funcionario se mostró crítico con el “reordenamiento institucional” del Gobierno nacional del sistema sanitario, implementado a través de los decretos 458/2025, 459/2025 y 460/2025 que implicó el cierre del Instituto de Medicina Tropical y del Instituto Nacional del Cáncer, entre otros cambios.
“Este ajuste pone en riesgo la salud de la población. No creo que sea un ajuste impulsivo, sino que hay una idea clara de que todos los espacios tienen que estar privatizados y en este sentido van los corredores viales, el terreno aeroportuario… todo va por ese camino”, anticipó.





