BUENOS AIRES (Medios digitales). La Cámara de Casación Penal ordenó ayer absolver a una de las cuatro personas que habían sido condenadas por el secuestro extorsivo y crimen de Santiago Miralles (6), cuyo cadáver fue hallado en 2005 en un pozo ciego de la casa lindera a la suya en la localidad de Canning.El padre del niño confirmó a las agencias de noticias que el fallo fue firmado por los integrantes de la sala I de la Cámara de Casación Penal, Luis María Cabral, Gustavo Hornos y Eduardo Riggi.Además, los magistrados ratificaron la condena para dos de los acusados y ordenaron que se le fije una nueva pena al restanteEn el 2008, el Tribunal Federal Nº 1 de La Plata condenó a prisión perpetua a los cuatro imputados. Las penas fueron contra el matrimonio Enrique Eloy Coito Piriz y Ana Isabel Machado Vargas, el hijo de estos, Henry Alexander Coito Machado, y su padrino Abel Domínguez Farias.Los jueces Carlos Rozanski, Horacio Isaurralde y Norberto Lorenzo, los consideraron coautores de "secuestro extorsivo triplemente agravado por tratarse la víctima de un menor de 18 años, haber participado en el hecho tres o más personas y haberse ocasionado intencionalmente la muerte de la persona ofendida". El pequeño Miralles fue visto por última vez a las 16 del miércoles 13 de julio del 2005, mientras jugaba en la vereda de su casa de Canning, partido de Esteban Echeverría. Casi 24 horas después sus familiares recibieron una llamada extorsiva en la que un hombre les exigió 20 mil pesos para liberarlo sano y salvo. Los padres lograron juntar unos 5.000 pesos en 24 horas, pero los delincuentes nunca más se comunicaron. El cadáver del niño fue hallado tres días después de su desaparición en un pozo ciego ubicado en el predio de la quinta lindera a la casa de los Miralles.
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