POSADAS. Los tres suboficiales de la Policía de Misiones, detenidos después de que un oficial de la misma fuerza cayera con 123 kilos de marihuana, en septiembre pasado, se manifestaron inocentes y aseguraron desconocer las circunstancias de la sustracción de una tonelada de esa droga en la comisaría seccional Primera de Puerto Rico.Los tres detenidos, a disposición del Juzgado Federal de Eldorado, efectuaron esas manifestaciones en el sumario administrativo que lleva adelante el departamento de Asuntos Internos de la Policía.Asimismo –según fuentes confiables-, dejaron deslizar que el oficial, principal implicado en la maniobra, “andaba en cosas raras” pero que ellos jamás quisieron entrometerse.Los cuatro uniformados se encuentran en situación pasiva, pero todo indica que terminarán siendo exonerados de las filas de la fuerza de seguridad provincial.Obviamente que estas manifestaciones no tienen vinculación ni incidencia en el expediente que se instruye en el Juzgado Federal de Eldorado, a cargo del magistrado José Luis Casals.En estas actuaciones, la situación de los cinco detenidos –cuatro uniformados y un ex convicto- es más que comprometida. Sobre todo, porque, al parecer, la Justicia contaría con el resultado de los entrecruzamientos telefónicos que ubicaría a todos en el armado y ejecución de la maniobra.Una fuente de la investigación indicó que el juez Casals podría definir la situación procesal de los cinco en las próximas horas, antes del inicio de la feria por el receso vacacional de enero.La gran incógnita radica en saber si la Justicia se quedará allí o investigará más arriba, buscando posibles cómplices en la cadena de mandos superiores.Hasta aquí cuesta creer que se pueda robar una tonelada de marihuana sin contactos en las más altas esferas de la fuerza de seguridad provincial.El episodioEl escándalo estalló la madrugada del 3 de septiembre pasado, cuando un oficial del Comando Radioeléctrico de Puerto Rico fue detenido a la altura de la localidad de Puerto Leoni con 123 kilos de marihuana. Transportaba la droga en su propio vehículo, un Fiat Palio de color blanco.En el mencionado procedimiento intervino una patrulla de Prefectura Naval Argentina y un cómplice del uniformado logró escapar.No obstante, se entregó a los pocos días en la comisaría seccional Primera. Muchos indicaron que el hombre estaría más seguro adentro que afuera de la cárcel.El mismo día en que ocurrió el hecho, PRIMERA EDICIÓN pudo establecer que aquellos 123 kilos de marihuana habían sido sustraídos de un cargamento de 4.200 kilos incautados en marzo pasado en la zona de la localidad de Ruiz de Montoya. El recuento de la droga, efectuado por el Juzgado Federal de la ciudad de Eldorado, estableció que el monto de lo robado superó los mil kilos de ese estupefaciente vegetal.Al momento de su detención, el oficial prestaba servicios en el Comando Radioeléctrico, pero desde hacía pocos días. Antes lo había hecho en la comisaría seccional Primera, justamente escenario del ilícito.Lo curioso del caso es que, entre sus ropas, luego de ser arrestado, se encontró un juego de llaves de la dependencia policial donde estaba la droga. Cabe consignar que fuentes de la propia Policía indicaron que el sospechoso no tenía antecedentes en su legajo y al parecer, era dueño de un legajo impecable.En ese contexto se puede analizar dos cuestiones: o estaba amparado por la superioridad en Puerto Rico o esta no tenía idea de lo que sucedía en sus narices. Eso lo determinará la Justicia, que continúa investigando el caso.





Discussion about this post