Ubicado en la zona sur de la capital provincial, el merendero “Corazones Felices” del barrio San Juan Diego atiende a casi un centenar de niños de escasos recursos que hace pocos días casi se quedan hasta sin techo, debido al cortocircuito que se produjo en la precaria e irregular conexión eléctrica que disponen.
La fundadora y referente del merendero, Luján Villalba, visibilizó la situación y pidió poder acceder de manera formal al servicio de energía eléctrica porque actualmente reciben luz a través de un pilar en el que están conectadas 89 familias.
Villalba explicó a PRIMERA EDICIÓN que “fui hasta Energía de Misiones a pedir una ayuda, para ver si, por lo menos, nos pueden bajar un cable de esos pilares ya existentes, un cable de mayor calidad hasta mi domicilio y poder utilizarla para el merendero porque lo necesitamos para atender a los niños”.
Aclaró que la situación en la que se encuentran es irregular, en el sentido que “no tenemos los papeles de los terrenos donde vivimos porque fueron donados por la capilla San Juan Diego y que es un predio de 50 x 100 metros, aproximadamente. Acá hay familias que viven hace cinco o seis años y en mi caso hace tres años. La falta del boleto o el título hace que no nos atiendan pero acá vino el Defensor del Pueblo, se relevó el barrio y así es que tenemos estos pilares para tener energía pero lo que queremos es avanzar en la regularización porque una cosa es estar enganchados y otra diferente es que nosotros queremos pagar por la luz que consumimos pero con un servicio como tiene que ser”.
El barrio San Juan Diego, “está al lado de Alberto Fernández”, dijo Villalba y agregó que “chispearon todos los cables, el otro día, y casi prendió fuego todo. Si llega a pasar eso no podremos apagar el fuego de las casas y acá hay muchos chicos. Necesitamos una luz propia lo antes posible, que alguna autoridad venga, compruebe lo que les estamos diciendo y nos ayude con el tema del cableado y de las luces”.
Reciben donaciones
En referencia al merendero dijo que “las familias tienen entre cuatro y seis chicos, los cuales vienen al merendero y son casi cien. Quienes puedan colaborar, pueden acercarnos leche en polvo, azúcar, cacao, harina, aceite, sal, y también les servimos un plato de comida, cuando conseguimos los productos, así que recibimos arroz, fideos, porotos, lentejas, polenta, maíz para el locro, puré de tomate”.
Villalba pidió que “quien pueda ayudarnos por la luz o el comedor que nos contacte al 3764-693333”.