El procedimiento desplegado por la Prefectura durante la siesta del miércoles para perseguir e interceptar una canoa a remos cargada con bidones de combustible de contrabando hacia Paraguay, comenzó esclarecerse ayer con la divulgación de un video registrado por efectivos de la fuerza argentina en Puerto Rico.
En el operativo fue detenido un integrante de la Armada Paraguaya que invadió con una lancha ligera la jurisdicción argentina como apoyo al bote en el que dos civiles, uno de ellos menor de edad, intentaban cruzar a Puerto Triunfo con los recipientes cargados con nafta en territorio misionero.
Si bien el juez Federal de Oberá, Alejandro Marcos Gallandat Luzuriaga, aguarda el sumario con los informes de la Prefectura Naval Argentina (PNA), el video que trascendió ayer y que fue tomado con un teléfono celular desde la embarcación de la fuerza argentina, despejaría dudas respecto a que se realizó en jurisdicción de Argentina y con el protocolo estricto de persecución y las maniobras de contingencia autorizadas. Principalmente en cuanto al uso de la fuerza, los golpes con tonfa al brazo del marino paraguayo para que frenara la lancha y luego el disparo con balas de goma en la mano izquierda y que permitió que el riesgo finalizara y se concretaran las detenciones.
Respecto a los protagonistas, el juez notificó que tanto el civil mayor de edad, como el integrante de la Armada, regresaran a Paraguay pero supeditados a la citación para que sean indagados provisoriamente por “tentativa de contrabando” y “resistencia a la autoridad”, delitos previstos por la Ley 22.415 “código aduanero” y artículo 239 del Código Penal Argentino.
El episodio de violencia se inició con los disparos de postas de goma al aire de orden de alto que el lanchero de la Armada Paraguaya desoyó en el intento por huir remolcando a los presuntos contrabandistas. En el video se observa además que, para buscar la fuga el marino hace saltar a su bote a los civiles y abandonar la canoa a remo. No tuvo tiempo porque la lancha de la PNA les bloqueó el paso y obligó a que detuvieran el motor.
El efectivo paraguayo fue identificado, por superiores horas más tarde, como Alberto Martín Rojas Cabrera y a quien los prefecturianos habrían observado blandir un arma de fuego, una pistola nueve milímetros que fue secuestrada y puesta a disposición del juez Federal de Oberá.
Resta determinarse si Rojas Cabrera gatilló el arma cuando vio que se aproximaba la embarcación argentina. El mismo día se indicó que la persecución fue en jurisdicción fluvial argentina y que la lancha que condujo el marino paraguayo correspondía a la fuerza de seguridad que representa.
Testigos aseguraron que fue “como una película” de lanchas que corrían hacia Puerto Triunfo intentando escapar y detrás el bote rápido de la PNA, adaptado para este tipo de eventualidades. Según fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, intervino el cónsul de Paraguay en Posadas, Rolando Goiburú, quien solicitó informes de lo sucedido.
La versión que sorprendió y hasta el momento no fue rectificada correspondió al Comando de la Armada Paraguaya base “Itapúa”, que emitió un comunicado que contradice a las imágenes de video de los prefecturianos y voces de testigos.
La Armada afirmó que su subalterno intervino para asistir a “la canoa que le estaba ingresando agua y sus tripulantes corrían riesgo de hundimiento (SIC)”.
También sostuvo que el suboficial Rojas Cabrera se encontraba apostado en la zona como parte de su trabajo de inteligencia y, por ende, se encontraba sin ningún distintivo de la institución.
También adelantó, aunque el sospechoso aún no fue indagado, que acudió a los civiles en la canoa porque los oyó pidiendo auxilio porque se “les hundía la embarcación”.
Resulta llamativa la versión porque el bote estaba repleto de bidones con combustible y si el percance fuera de tal gravedad habrían soltado o arrojado al río Paraná el peso de los por los menos diez recipientes de cinco, diez y veinte litros que transportaban a remo.
Aún más confusa la versión se tornó cuando se confirmó que el operativo fue en aguas argentinas y que la lancha de la PNA es más potente, y que los operativos de contingencia en estas eventualidades incluyen comunicaciones inmediatas entre ambas fuerzas, Prefectura frente a Puerto Rico y la Armada Paraguaya en la orilla de Puerto Triunfo, altura en el que el río mide 1,2 kilómetros, aproximadamente.