El 2 de marzo de 1978, en el pueblo Corsier-sur-Vevey de Suiza, dos hombres robaban de un cementerio el cadáver del célebre actor Charles Chaplin, dos meses después de su muerte.
Luego de que Oona, la viuda de Chaplin, rechazara la petición de rescate de 600.000 dólares y comenzara a recibir amenazas telefónicas contra sus dos hijos menores, se llevó a cabo una exhaustiva búsqueda policial.
Charlie y Oona, su cuarta esposa, se casaron en el año 1943, cuando él tenía 54 años de edad y ella 18. Tuvieron 8 hijos con quienes se instalaron en Suiza en 1952.
La intensa investigación llevada adelante para encontrar a los dos culpables del robo del cuerpo del actor consistió, entre otras cosas, en el monitoreo del teléfono de Oona y de 200 cabinas telefónicas de la zona.
Luego de cinco semanas de búsqueda, la policía arrestó al polaco Roman Wardas y al búlgaro Gantscho Ganev, dos mecánicos de automóviles.
El cuerpo fue encontrado en un campo de maíz, cerca de la casa de la familia Chaplin.
Al parecer, Wardas y Ganev habían robado el cuerpo en un intento de resolver sus problemas económicos. Fueron acusados de robo de tumbas e intento de extorsión, y condenados a cuatro años y medio de trabajos forzados.
Posteriormente, la familia de Chaplin enterró el cuerpo en una fosa de concreto, para evitar posibles hurtos futuros.