El objetivo de este Día Mundial es ayudar a crear conciencia sobre la necesidad de prestar atención a la salud de la mujer y prevenir las enfermedades más frecuentes en esta etapa. Uno de los objetivos es que los países, a través de sus sistemas nacionales de salud, activen los programas de educación para que las mujeres puedan conocer cómo abordar esta etapa de la vida y así poder prevenir los síntomas y patologías.
Sabemos por la OMS que dentro de treinta años habrá más de mil millones de mujeres con cincuenta años o más, es decir el triple que en 1990. Esto implicará muchos cambios en el cuidado de la salud especializado en este colectivo y por ello el trabajo de los ginecólogos será imprescindible.
El imparable incremento de la esperanza de vida hace que estas mujeres lleguen a una edad muy avanzada y la calidad de su salud puede deteriorarse debido a los desarreglos debidos a la pérdida de estrógenos.
El cambio en la comprensión de la menopausia, junto al aumento de la esperanza de vida entre otros cambios sociales y sanitarios están ayudando a cambiar el matiz negativo que solía tener este término.