Hace 25 años se alinearon los astros y las mentes más brillantes para alumbrar en solo doce meses un aluvión de memorables videojuegos que convirtieron aquel 1996 en, posiblemente, el mejor año de la historia “gamer”.
Era una época donde las consolas clásicas iban dejando paso a una nueva generación liderada por la PlayStation y secundada por Sega Saturn y Nintendo 64. Pero todavía coexistían con las computadoras e incluso la mayoría de los grandes juegos se armaban en función de las prestaciones que ofrecían estas últimas.
Duke Nukem 3D y Quake
Si algo caracterizó a los años 90 era la acción a base de golpes y chistes fáciles. Fruto de esa combinación nació Duke Nukem 3D, situado en una ciudad de los Ángeles caótica e invadida por extraterrestres, donde había que usar un buen puñado de armas para defenderse.
Son inolvidables las referencias a la cultura pop como frases de películas como Terminator, Alien, Jaws, Star Wars e Indiana Jones.
Hasta hoy ha vendido más de 3,5 millones de copias y es una de las franquicias más jugadas.
Meses después se presentaba Quake, y el mundo de los videojuegos cambió por completo: la velocidad, los gráficos y una jugabilidad multijugador hacían que fuera uno de los preferidos en los cibercafés de la época.
El Quake Engine, motor que se usó para programar el juego es uno de los primeros en incorporar renderizado en auténtico 3D en tiempo real y ha servido para que juegos como Half-Life se llevaran a cabo.
Quake y las demás secuelas han vendido más de 4 millones de copias en todo el mundo.
Lara Croft y Jill Valentine
1996 fue también el inicio de dos de las sagas más importantes en la industria de los videojuegos, Tomb Raider y Resident Evil vieron la luz y cambiaron muchas cosas . Ambos juegos están interpretados por mujeres valientes y fuertes que toman las riendas de la narración y el protagonismo de la historia. Ya no hay princesas que rescatar, ellas solas pueden y muy bien.
La primera en ver la luz, o más bien la niebla que había alrededor de Raccoon City, fue el personaje de Jill Valentine en Resident Evil en marzo de 1996 y su historia no ha parado. Más de 30 títulos han sido publicados durante estos 25 años, películas, cómics, figuras… el universo Resident Evil es una auténtica mina de oro.
Pero vayamos a ese marzo de 1996, donde el juego fue destinado a PlayStation, Sega Saturn y PC. El juego tuvo una gran acogida y solamente en PlayStation llegó a vender más de 2,5 millones de unidades, sin contar el remake para DualShock lanzado más tarde y que vendió más de 2,3 millones.
Pero si hay una reina indiscutible en el mundo de los videojuegos, ella es Lara Croft, la aventurera más taquillera y la que trajo consigo una de las sagas de videojuegos más trepidantes de todos los tiempos.
Desarrollado por Core Design y distribuido por Eidos Interactive, Tomb Raider fue una de las primeras aventuras 3D en perspectiva en tercera persona con una calidad que te dejaba sin habla. Se lanzó inicialmente para Sega Saturn, aunque rápidamente se distribuyó para PC y PlayStation, donde ha sido uno de los videojuegos más vendidos, con siete millones de unidades vendidas.
El juego creado por Toby Gard se convirtió en una de las grandes franquicias y al año siguiente se lanzó la segunda parte. En 2001 Angelina Jolie se ponía por primera vez en la piel de Lara Croft para empezar otra saga, esta vez cinematográfica y que ya ha tenido un remake.
Super Mario 64, Sonic 3D y Crash Bandicoot
Uno de los géneros más clásicos son los juegos de plataformas: esos que consisten en correr, recoger objetos, saltar y matar enemigos para finalizar la pantalla.
Sonic y Mario eran los reyes de este género y dominaban el mercado absoluto, pero un marsupial venido de Oceanía se puso en su camino para ser otro referente más para millones de personas que no crecieron con el erizo o el fontanero bigotudo.
Crash Bandicoot fue desarrollado por Naughty Dog en 1996 y desde el primer momento caló en el público, su estilo desenfadado y alocado enamoraron a más de 6 milones de personas y convirtieron el juego en el octavo más vendido de la historia de PlayStation.
También sacó título ese año Super Mario 64 para Nintendo64, el primer videojuego en 3D y mundo abierto de la saga del fontanero italiano, que sumó 11 millones de copias vendidas.
Y Sonic tampoco faltó a la “moda” del 3D que estalló en 1996.
Juegos de rol
Diablo llevaba el RPG a donde nadie había llegado y más de un millón de personas estaban enganchadas en todo el mundo. Se estima que para 2001, Diablo había vendido más de 2,5 millones de copias. Para hacernos una idea de lo que ha significado para el género, Diablo II vendió más de 4 millones de copias, pero su tercera entrega consiguió vender 3,5 millones de copias el primer día y 6,3 millones de copias la primera semana y esto le convirtió en 2013, ser el videojuego de PC más vendido de la historia.
Ese mismo año salía uno de los juegos más originales de esta magnífica generación: After Life, el juego de estrategia de Lucas Arts que te convertía en el arquitecto del cielo y del infierno.
Allí somos el Demiurgo, un semi dios encargado de construir el cielo y el infierno, donde el humor y la sátira de la franquicia de George Lucas está presente. El juego no fue un éxito de ventas y tampoco es que la crítica del momento se entusiasmara con esta producción, pero tan solo la idea de poder dirigir el cielo y el infierno parece maravillosa.
Command & Conquer: Red Alert es sin duda uno de los mejores juegos de estrategia en tiempo real, con un 94% de valoración. La historia en la que se ve envuelto este videojuego no puede ser más insólita pero interesante a la vez: Albert Einsten inventa una máquina del tiempo y viaja atrás para matar a Hitler antes de la Segunda Guerra Mundial. El bueno de Albert, al volver a 1946 piensa que todo está arreglado, pero… ante la ausencia de Hitler, son los rusos los que deciden dominar el mundo. Vendió nada más y nada menos que un millón y medio de copias en su primer mes.
¿El mejor PC Fútbol de la historia?
PC Fútbol 5.0 fue uno de los managers de fútbol más importantes de la historia de los videojuegos. Estamos hablando de la temporada 96/97 y los 34 goles de Ronaldo con el Barcelona. De la Liga de Capello con Suker y de las paradas imposibles de Songo’o en el Deportivo. Y también hablamos de la inclusión de la 2ºB en la base de datos que había experimentado un cambio el año anterior con el modo ProManager.
También pudimos tener cuerpo técnico y empleados específicos por primera vez y disfrutamos de una interfaz mucho más intuitiva y la opción de por fin fichar en América.
Broken Sword, The Neverhood y Toonstruck
En el género de aventuras gráficas, cualquier lanzamiento quedaría ensombrecido por el “Big Three” (Monkey Island, Maniac Mansion e Indiana Jones). Todas ellas con títulos estrenados anteriormente, seguían haciendo las delicias de los amantes de los puzzles.
Pero estas franquicias iban a ser eclipsadas por la irrupción de un abogado de patentes californiano llamado George Stobbard y una intrépida reportera francesa, Nicole Collard. Broken Sword: La sombra del Templario ha proporcionado a la industria hasta 5 títulos. La aventura lleva por un viaje por Francia, España, Irlanda o Siria donde habrá que resolver un asesinato que llevará a toda una trama templaria con siglos de silencio y, que a más de uno le sonará a cierto libro de Dan Brown (el videojuego se hizo antes).
Y la lista (aleatoria, por cierto) se cierra con dos historias muy entretenidas, pero que a pesar de convertirse en juegos de culto, no llegaron a vender lo que se esperaba.
Toonstruck tiene como plato fuerte que está interpretado por Cristopher Lloyd, un animador que es teletransportado a un mundo de dibujos animados poblado por sus creaciones. La disparatada historia para adultos, costó alrededor de 8 millones de dólares y fue un fracaso comercial que no consiguió que se lanzara la secuela que se tenía prevista. Aunque eso sí, la aventura cuenta con una buena fanbase que ha intentado en algunas ocasiones retomar el proyecto de la secuela.
Fotograma a fotograma, así se rodó la aventura gráfica The NeverHood, una divertida historia de plastilina que hizo su aparición aquel 1996 para hacerse un hueco en el corazón de toda una generación. Porque esta aventura gráfica, ya descatalogada, ha sido uno de los juegos más difíciles con acertijos basados en colores, notas y secuencias de símbolos. Y aunque el juego recibió buenas críticas, no se sumaron al número de ventas de un año complicado, ya que en el mercado, como habíamos dicho anteriormente, había mucho dinero que gastar.
Fuente: Marca