Madrid es la comunidad autónoma española más castigada por la pandemia de coronavirus, con 8.400 de las 28.400 muertes que se registraron en todo el país, y es una de las regiones que está enfrentando rebrotes en las últimas semanas.
Por esa razón, las autoridades están enfocadas en generar conciencia ciudadana, para evitar que se acelere la propagación del virus.
En el marco de la campaña “Protégete, protégenos”, el Gobierno acaba de publicar un video para impulsar el uso de tapaboca en la población. Para algunas personas que se manifestaron en redes sociales, fue excesivamente crudo. En cualquier caso, si buscaba generar impacto, lo logró.
“Tu piso en verano, 32 grados”, dice el locutor al comienzo del spot. Es el principio de una enumeración en la que se menciona la temperatura esperable en diferentes circunstancias.
“Cervezas con amigos, 30 grados. Discoteca, 28 grados. Hospital, 25, grados. Unidad de Cuidados Intensivos, 22 grados”, continúa. Hasta que llega a la última parada del recorrido. “Horno crematorio, 980 grados”.
“Hay cosas que dan más calor que una mascarilla. Protégete. Protégenos”, es el mensaje final del video.
La intención de las autoridades es llamar la atención sobre dos cuestiones que las inquietan. La primera son los descuidos de los jóvenes al reunirse con amigos y salir de noche, lo que llevó a muchos gobiernos locales a cerrar los espacios de ocio nocturnos, asociados en algunos casos al aumento de los contagios.
El otro punto es la falta de cumplimiento en el uso del tapaboca. Muchas personas se quejan de que, en las altas temperaturas del verano madrileño, puede llegar a ser muy molesto utilizarlo. A la Comunidad le pareció importante recordar a la población qué más calor hace dentro de un horno crematorio.
Madrid endureció el jueves pasado las medidas para contener el incremento de nuevos contagios de coronavirus. Precisamente entre esas medidas se destaca el uso obligatorio de mascarilla en cualquier circunstancia en todos los lugares públicos, y el límite máximo de diez personas en reuniones y establecimientos hosteleros o de ocio.
Los pequeños focos de transmisión aumentaron en toda España de manera desigual desde que se levantó el estado de alarma, el 21 de junio pasado, cuando acabaron el confinamiento y las restricciones severas de movilidad y se intensificaron la actividad comercial y las relaciones sociales. Para contener los brotes, las autoridades insisten en recomendar que se eviten grandes concentraciones de personas, por ejemplo en reuniones familiares y actividades de esparcimiento nocturno.
La incidencia acumulada de casos ha experimentado “un aumento significativo”, lo que obliga a “reforzar las medidas de prevención” y fomentar un comportamiento responsable de la población, argumentaron las autoridades sanitarias de Madrid. Los locales de hostelería, como restaurantes, bares y discotecas, deberán cerrar a la 1.30 horas (23.30 GMT) como máximo.
Además, los salones de banquetes y los locales de ocio deberán llevar un registro voluntario de la fecha y los datos de contacto de los clientes para localizarlos si se detectara algún caso.
Salvo las islas Canarias, donde aún no es obligatoria la mascarilla, Madrid fue la última región que impuso su uso en todo lugar público a partir de los 6 años, aunque fuera posible mantener la distancia interpersonal de seguridad para prevenir el contagio, excepto alguna excepción como la práctica deportiva.
España en la “segunda ola”
Esta semana, España volvió a superar el millar de contagios, lo que asciende la cifra total a 302.814 casos de coronavirus y, desde que comenzó la pandemia, se registraron 28.498 muertes.
El último informe publicado por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) sitúa a Aragón como la región con el brote de coronavirus más descontrolado de Europa. La tasa de infección es superior a 120 por cada 100.000 habitantes, la mayor en toda España.
En las últimas 24 horas, Andalucía sumó seis nuevos focos de coronavirus: dos en Cádiz, otros dos en Málaga, uno en Jaén y otro en Huelva. De esta forma, todas las provincias andaluzas tienen al menos cinco brotes de coronavirus. En total, la comunidad suma 80 focos activos que afectan a 882 personas.
Fuente: Infobae