Uno de los tres policías detenidos por el crimen de Victor Márquez Dos Santos (16) pidió ampliar su indagatoria y, tras negar las acusaciones en su contra, afirmó que en el horario en que se habría producido el hecho “estaban todos en la comisaría de Santa Ana”, indicó un vocero del caso.
Esta declaración se contradice con los dichos de otro de los uniformados, quien a principios de esta semana manifestó que vio con sus propios ojos cómo fue la ejecución del menor e incluso señaló a uno de los oficiales que está tras las rejas como el autor material.
El efectivo que declaró este jueves ante el juez de Instrucción Fernando Luis Verón, habría señalado que a las 3.10 volvió junto a otro policía de recorrida y estacionó el móvil en la citada dependencia.
Refirió además que nadie salió de la comisaría, tampoco el patrullero, hasta que llamaron a la mañana (del sábado 24 de agosto pasado) avisando que habían hallado un cuerpo sin vida. Por último el sospechoso (quien en su momento y al igual que sus camaradas apresados se abstuvo de ser indagado) habría manifestado que “no puede entender como la evidencia balística apuntó a su camarada, ya que nadie salió del lugar”, confió una fuente.
De acuerdo a los datos que manejan los investigadores, basado en declaraciones de testigos, entre las 3.30 y 3.40 se escucharon detonaciones y uno de ellos declaró que vio al móvil policial en ese horario salir de la calle donde fue hallado Víctor, y que con “las luces y baliza apagadas giró tan bruscamente que casi volcó. Que reconoció que era de la fuerza porque decía Policía y que además la seccional local tiene un solo patrullero (una Chevrolet S-10)”, agregó un vocero. Estos indicios también marcan contradicciones respecto a los dichos del uniformado que fue indagado ayer por Verón.
Vale recordar que una de las evidencias más sólidas contra el principal sospechoso es la prueba de balística que determinó que el proyectil que mató a la víctima salió de su arma reglamentaria (una pistola 9 mm).
Declararon familiares
En las próximas horas se aguardan más declaraciones testimoniales (hay 40 previstas) a cargo del juez instructor, Fernando Verón.
El jueves hubo otras dos, como ser la de Eliana, una de las hermanas de Víctor y su cuñado, Enrique Recalde. En ese sentido se supo que ambos ratificaron sus dichos de sede policial.
Recalde relató entre otras cosas que “el principal acusado de los tres policías fue a la vivienda donde residía la víctima y tras sacar fotografías les pidió la notebook del adolescente”, la cual le entregaron y fue incautada. Actualmente dicho dispositivo es un elemento de prueba.
Los tres sospechosos detenidos estaban a cargo de la patrulla que interceptó o se cruzó con Víctor Dos Santos durante la madrugada del sábado 24 de agosto. Y uno de ellos, de acuerdo a los primeros datos y evidencias, el oficial de servicio de la guardia de la comisaría de Santa Ana, fue quien le habría disparado en un ojo a la víctima, reducida en el piso boca arriba y sin resistirse.