Juan Antúnez tiene 32 años y vive en el barrio Sarmiento. A raíz de un accidente quedó inhabilitado físicamente para trabajar, si bien recibe una pensión, no es suficiente para mantener a su familia. Sumado a esto la casa en la que vive con sus cuatro hijos y su mujer es de chapa de cartón.Al ver la impotencia en conseguir los recursos para mejorar su vivienda Juan decidió poner en venta uno de sus órganos, un riñón.“Estoy decidido a vender uno de mis órganos para conseguir un poquito de madera para mejorar mi situación y la de mis hijos porque cuando llueve acá gotea por todos lados, quiero que ellos tengan una mejor calidad de vida”, indicó.Al ser consultado si recurrió a Acción Social o algún organismo, Juan señaló: “Sí, fui, hace mucho que vengo pidiendo, pero no hay resultado por eso tomé esta decisión. Lo hablé con mi señora pero mi papá y mi mamá no saben nada de esto. Yo sé que muchos me van a criticar por esto que hago, pero quiero que vengan y se pongan acá con los chicos un día de lluvia”.Juan dice que no sabe qué precio poner al órgano. “Que me den maderas nomás o el valor de mi casa, no pido material ni nada de eso, sólo maderas. Yo hago esto por mis hijos, voy a dar la vida por ellos si es necesario”.De los cuatro hijos, dos están en edad escolar y los otros dos son menores. “Sé que la gente me va a entender porque busco el bien para ellos, no voy a estar toda la vida con mis hijos para criarlos y cuando yo no esté ellos van a quedar en la nada completamente”.El duro testimonio de Juan llegó a oídos de quien está al frente del área de Acción Social, Hugo Núñez, quien manifestó que “conocemos la situación de Antúnez, pero la realidad es que tenemos entre 1.000 y 1.500 familias en situación de precariedad y la familia Antúnez habría recibido un Plan Techo hace unos meses”. “Desde Acción Social siempre se prioriza a las familias que no tienen ningún tipo de ingresos y entendemos que si bien Antúnez tiene algún tipo de ingreso esto no alcanza para la compra de un corte de casa, lo que haremos es charlar con algún empresario maderero para lograr hacer el cerramiento de la casa. Con el Plan Techo está el techado completo de zinc, pero la parte de adentro todavía está en malas condiciones”, agregó.Núñez señaló que son 25 mil pesos que debe poner el municipio por cinco casas por mes y que se apunta a familias sin ningún tipo de ingresos.El compromiso de Acción Social es continuar con el seguimiento de la familia Antúnez y tratar de evitar que se llegue a una situación extrema.





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