BUENOS AIRES (DyN). Guillermo Fernández saca ventaja respecto de Diego Rivero en cuanto a la posibilidad de ser el volante derecho titular del equipo de Boca el domingo ante Estudiantes de La Plata, en tanto que Leandro Paredes fue probado como enganche titular en la práctica de fútbol de ayer en La Bombonera.Fernández, de buena actuación el pasado sábado en el amistoso ante Cerro Porteño, cuando ingresó en el segundo tiempo, el miércoles había reemplazado a Rivero en el cuarto de hora final de la práctica, un día después estuvo entre los titulares desde el principio y marcó claras diferencias de rendimiento.En cuanto al ensayo con Paredes, el juvenil es una posibilidad pero parece más probable que el técnico, Julio Falcioni, se decida por el tridente Lautaro Acosta-Lucas Viatri-Santiago Silva como fórmula de ataque.La práctica en La Bombonera comenzó con Viatri y Silva como dupla ofensiva, con Paredes detrás de ellos, pero Acosta ingresó por Silva en el segmento final, más que nada porque luego de las lesiones musculares que sufrió se lo quiere preservar, y mostró un buen nivel. Aunque Falcioni seguirá probando y pensando, hoy puede decirse que la más factible formación de Boca para jugar con Estudiantes es la siguiente: Agustín Orión; Clemente Rodríguez, Rolando Schiavi, Guillermo Burdisso, Juan Sánchez Miño; Fernández, Leandro Somoza, Walter Erviti; Viatri; Acosta y Silva.El bloque defensivo y las posiciones de Somoza y de Erviti se mantuvieron firmes en el segundo día de práctica consecutivo, lo que despeja cualquier duda, de modo que lo que queda por confirmar es la presencia de Fernández o de Rivero, con ventaja para el primero, y de Paredes o Acosta, con mejores perspectivas para el último.Pese a que el reemplazado por Acosta en los últimos veinte minutos fue Silva, no es previsible que Falcioni vaya a excluir del equipo al uruguayo, uno de sus jugadores predilectos. La práctica en el estadio se prolongó por 45 minutos y resultó mucho más intensa e interesante que la anterior, con variantes en el desarrollo y muchas modificaciones en el marcador, que fue cambiando de mando con pocos minutos de diferencia.





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